Curso de Verano de la UCA, Julio de 2011
Fiestas tradicionales de Andalucía. Pasado y presente.
Alberto Ramos Santana
Alberto Ramos Santana
En su Memoria para el arreglo de la policía de los espectáculos y diversiones públicas y sobre su origen en España, Gaspar Melchor de Jovellanos al tratar en la segunda parte sobre las diversiones populares, escribió: “Este pueblo necesita diversiones, pero no espectáculos. No ha menester que el gobierno le divierta, pero sí que le deje divertirse”
Mirando el calendario festivo actual se puede concluir que el panorama de las diversiones populares sigue en retroceso. Aunque han surgido celebraciones motivadas nuevas, como la del Día de la Constitución, lo cierto es que se han suprimido muchas fiestas, principalmente religiosas, mientras que se ha generalizado declarar festivos días que antes no lo eran, como el Lunes de Pascua, mientras se cambia de día de la semana fiestas como el Corpus, celebrado siempre el jueves correspondiente y trasladada a domingo con la finalidad de concentrar el tiempo festivo para que no altere el ritmo laboral. De esta manera el número de fiestas es claramente hoy mucho más reducido que antaño, aunque estrictamente no lo sea el tiempo de recesión del trabajo.
Mirando el calendario festivo actual se puede concluir que el panorama de las diversiones populares sigue en retroceso. Aunque han surgido celebraciones motivadas nuevas, como la del Día de la Constitución, lo cierto es que se han suprimido muchas fiestas, principalmente religiosas, mientras que se ha generalizado declarar festivos días que antes no lo eran, como el Lunes de Pascua, mientras se cambia de día de la semana fiestas como el Corpus, celebrado siempre el jueves correspondiente y trasladada a domingo con la finalidad de concentrar el tiempo festivo para que no altere el ritmo laboral. De esta manera el número de fiestas es claramente hoy mucho más reducido que antaño, aunque estrictamente no lo sea el tiempo de recesión del trabajo.
Y en la misma línea da la impresión de que muchas fiestas tradicionales, forzadas por disposiciones políticas, económicas y sociales, pierden sus características tradicionales y se reinterpretan con valores sociales homogéneos y actuales, muy diferentes a los que las motivaron. Hay menos fiestas y los tiempos festivos están hoy menos diferenciados Este proceso reductivo y homogeneizado, no queda del todo explicado aludiendo a factores económicos. El proceso de modernización y secularización debe ser también tenido en cuenta. Y a ello debe añadirse la transformación de la población activa, el despoblamiento de las zonas rurales, etc., y todo el conjunto de factores que ha contribuido a una homogeneización cultural.
Este curso tiene como objetivos los siguientes:
1) Analizar el origen y características de las principales fiestas tradicionales en Andalucía.
2) Conocer su importancia y sentido en la vida cotidiana de los andaluces.
3) Analizar su desarrollo y la pervivencia, o no, de sus rasgos tradicionales en la actualidad.
PROGRAMA:
Día 7 de julio
CONFERENCIA.
“El Carnaval en Andalucía”. Alberto Ramos Santana.
1º Breve síntesis sobre el sentido y el calendario de las
fiestas carnavalescas.
2ª Referencias históricas sobre distintas manifestaciones
del Carnaval en Andalucía.
3º Reflexiones personales sobre la situación actual del
Carnaval en Andalucía.
Origen del Carnaval
El Carnaval es posiblemente la manifestación festiva
tradicional que en mayor número de poblaciones andaluzas se celebra.
La fiesta que más prohibiciones y censuras ha conocido.
Origen del Carnaval tendencia a remitir a precedentes de
diferentes civilizaciones.
Bacanales, Saturnales, Lupercales (en honor a Baco, Saturno
y Pan) en las que la máscara, la música y la alteración del orden establecido.
En el mismo sentido, se ha hablado del mes de Phaljova en la
India, la fiesta de Falo en Egipto o la Axura árabe.
Julio Caro Baroja: “el considerar al Carnaval como fiesta de
origen pagano en un tópico que repite la gente no letrada”.
El Carnaval, hijo pródigo del cristianismo.
En la civilización cristiana el calendario se relaciona con
los ciclos agrícolas y la liturgia, fracciona el año en épocas de júbilo y
penalidad: Adviento, Navidad, tiempo de Carnaval, Cuaresma, la Pascua, “ritmos
de verano” (noche de San Juan) Verano…
Las fechas del Carnaval varían cada año en función del
Miércoles de Ceniza.
Concilio de Nicea: la Pascua de Resurrección debe celebrarse
el primer domingo, después del primer plenilunio de primavera (1er domingo tras
la primera luna llena a partir del 21 de marzo).
Se restan siete días de Semana Santa y cuarenta de cuaresma,
fijándose entonces el Miércoles de Ceniza, los tres días previos son los de
Carnaval.
Al Carnaval, antes de la Cuaresma, lo representa don Carnal,
que simboliza la libertad y su reinado termina con las carnestolendas, es
decir, carnes prohibidas.
Las máscaras simbolizan la regeneración rimaveral que sucede
al invierno, asociándose por ello el Carnaval a rituales mágico-religiosos.
El Carnaval urbano comenzó hacia el siglo XI, coincidiendo
con el crecimiento de las ciudades y la presencia de un artesanado que realiza
exornos y carros alegóricos, apareciendo los cortejos carnavalescos y la
arquitectura efímera.
En España la fiesta, con sus caracterizaciones rurales y
urbanas, se viene celebrando desde la Edad Media.
Hay múltiples testimonios literarios:Égloga de Antruejo o El
libro del buen amor, que demuestran que el Carnaval se celebraba con gran
alegría y todo tipo de excesos, como previo y permitido desahogo antes del
rigor penitencia de la Cuaresma.
En Andalucía
Datos más antiguos contrastados son de Jaén a mediados del
siglo XV “Crónica del Condestable de Castilla Miguel Lucas de Iranzo” se
describen fiestas del Martes del Carnaval del año 1461, entre las que destaca
un torneo de calabazas entre hortelanos de Jaén, que se golpeaban con ellas
hasta destrozarlas, después hubo una gran colación de aves, cabritos, pasteles
y tartas de huevos revueltos con tocino, todo ello regado de vino.
En 1463 se realizó una “fiesta de locos” en honor del
Alcalde de Cambil y otros caballeros moros, tras la fiesta, otra gran comida
con gallinas, perdices, cabritos, pasteles, quesos, quesadillas y otros
productos, tan abundantes, dice la Crónica, que los comensales “se daban unos a
otros con ellos”, es decir, se tiraban la comida en medio del jolgorio.
En el siglo XV el Carnaval se celebra en toda España,
convirtiéndose en el siglo XVII en una de las fiestas más arraigadas en el
sentir popular español, con los manteamientos, las persecuciones, la caza de la
olla, tirar barro, agua sucia, huevos, salvado y afrecho, etc.
En Loja, las actas capitulares del 5/2/1580 refrejan fiestas
el domingo de Carnestolendas, al parecer con caballos.
Se perpetúan las demostraciones ecuestres, como testifica el
documento de 1765 titulado “Métrica descriptiva de los voluntarios, plausibles,
magníficos y reales festejos con que, los más ilustres y distinguidos
cavalleros de la siempre insigne, real y gran ciudad de Loxa, manifestaron en
sus destrezas hidalguías, en la celebérrima Justa de Cañas y otras celebraciones
ecuestres que celebraron, estimulados de la decente diversión a que convidan
los alegres días de Carnestolendas, del año 1765”.
Cádiz
Agustin de Orozco, narra a finales del siglo XVI, que en
tiempo de carnaval, los gaditanos arrancaban las flores de las retamas para
arrojárselas en broma.
Constituciones Sinodales (1591) y Estatus del Seminario de
Cádiz (1596) que los eclesiásticos y colegiales no bailen, ni canten, ni se
descompongan como hacen los seglares durante las fiestas. Que no salgan con
máscaras ni de ninguna otra manera tapados.
Acta matrimonial del 3/3/1636, quejándose de que los
trabajadores gaditanos se negaban a reparar su barco por estar en
“Carnestolendas”.
En 1678 el clérigo Nicolás Aznar fue acusado de mantener
relaciones adúlteras con Antonia Gil Moreno “desde las Carnestolendas del año
pasado que disfrazado de máscara entró en su casa a bailar y danzar y le dieron
dulces y estuvieron hablando”.
Prohibiciones
Prohibiciones desde el siglo XVI: Carlos I, en 1523,
prohibió “en absoluto” las máscaras.
Desde el año 1556 comenzó la “Devoción de las Cuarentas
Horas”, liturgia para contrarrestar las Carnestolendas. Según Gerónimo de la
Concepción, a mediados del siglo XVII en Cádiz y en Sevilla se celebraba el
jubileo de las Cuarenta Horas.
En 716 se prohibieron los bailes de máscara, recordando la
orden a los ayuntamientos.
En 1773 se recuerda la prohibición y el Ayuntamiento de
Cádiz informó que no había fiestas desde hacía años.
Vittorio Alfien relata que en 1772, en Cádiz, terminó “el
Carnaval con bastante alegría”.
En 1776 Henry Swinburne cuenta que “las mujeres lanzaban
cubos de agua desde los balcones…, las gentes humildes se dedicaban al fandango
y los gitanos a bailar un baile indecentísimo…”
“Todos los carnabales me vestía de máscara, y salía en quadrilla
con unas amigas en todo mi semejantes (sic), y con los caballeros más decentes
de este pueblo; con este antecedente y con haber oído decir que Vm. No se ha
acordado de las máscaras en toda su maldita obra, me lisonjeé con que en esta diversión
no pondría reparo mi Diego, pues nada había escrito contra ella; con esta
confianza previne tres vestidos de buen gusto, e invención; y después de
habernos juntado en casa de una amiga para ensayarnos en los bailes, llegado el
tiempo, le dixe a mi marido; mira hermano, ya el carnabal está en casa, y así
como todos los años tengo prestos mis vestidos para salir con Irenita, Nise y
Clorinda, y van de parejas con nosotros Don Celis, Don Anselmo Don Lucio y Don
Fabio, todos como sabes, muchachos de humor y habilidad de los más etrimetres y
más juiciosos de Cádiz; con que si te parece desde mañana principiaremos
nuestra lícita diversión” La Pensadora Gaditana, 1786.
Málaga las costumbres carnavalescas están documentadas desde
el siglo XVIII, con la celebración de bailes de máscaras, disfraces y desfiles
de carrozas.
En Isla Cristina documentación de 1789 alude a celebraciones
de décadas anteriores.
En Carmona hay referencias de máscaras en los días de
Carnaval desde al menos 1768, al parecer a expensas del corregidor Francisco
Carvajal y Mendoza. Y aunque años después –en 1782- se trató de prohibir las
actividades carnavalescas, está comprobado su uso en 1789.
Sevilla en 1806 al aproximarse el Carnaval las “de retozar”
se adueñaban de sus partidarios hasta
terminar poseyéndolos absolutamente en los tres días previos al “miércoles de
ceniza”. Descripción crítica, de rechazo: “las clases bajas pasan bebiendo y
alborotando por las calles de los barrios más humildes, y especialmente junto a
unos grandes patios que llamamos corrales, en cuyas pequeñas habitaciones
muchísimos pobres viven en medio de suciedad, miseria y corrupción”.
En 1807, en Granada hubo intenos de prohibir total o
parcialmente el desarrollo de la fiesta, pero no se logró por la resistencia
popular a perder una fiesta tradicional, que se celebra “desde bastante tiempo
atrás”.
Pese a todo las celebraciones carnavalescas siguieron,
incluso durante la Guerra de la Independencia. Hay testimonios de Cádiz y de
Zaragoza.
Refinamiento a principios del XIX
José María Blanco White: “Las diversiones de Carnaval
todavía en uso entre la clase media andaluza son mecerse en los columpios, dar
toda clase de bromas a los incautos, como estrellarse en la cabeza cascarones
de huevos rellenos de polvos de talco, arrojar a las damas puñados de confites,
a lo que ellas contestan rociando a sus asaltantes con agua por medio de una
lavativa. Pero este último y práctico juego está cayendo en desuso, y el
creciente refinamiento de las costumbres acabará bienpronto con todos ellos.
Las familias ricas dan un baile y una cena a los amigos de la tertulia, que
suelen celebrar en uno de los tres días del Carnaval propiamente dicho”.
Se ha generalizado sobre la prohibición del Carnaval durante
el reinado de Fernando VII, pero dicha prohibición fue parcial, y, dependiendo
de la época, se permitieron tan sólo los bailes de máscaras en casas
particulares y fiestas privadas, o se celebró el Carnaval con ciertas
restricciones en la calle.
En 1821, en Cádiz, destacaron las cuadrillas de hombres y
mujeres, que disfrazados, recorrían las calles “entonando canciones del país y
patrióticas”, con acompañamiento de guitarras y castañuelas.
Pero se intentaba corregir los excesos mediante bandos.
En Antequera un “Auto” emitido por el corregidor el 2 de
febrero de 1824 intentaba corregir los excesos que cometían los que denomina
“niños mal educados” y de los que según el “Auto” se podían seguir “fatales
consecuencias”.
En Isla Cristina se dan normas restrictivas en 1832 por el
alcalde Lorenzo de Elías con el fin de salvaguardar la moralidad de la villa.
Tras la muerte de Fernando VII volvió el Carnaval a retomar
nuevos bríos en toda España.
Características comunes de los carnavales de Andalucía y
España: cucañas, confetis, cunas, columpios, bailes, cuadrillas bailando y
cantando por las calles, gigantes y cabezudos…y también, pese a las protestas y
prohibiciones, jeringas de agua, triquitraques, saquillos, etc.
Lo más popular eran las máscaras, ya fuera individualmente o
formando parte de las que se denominaban “cuadrillas”.
Las cuadrillas salían a pie o en carruaje, acompañadas de
bandas de música; a estos grupos o cuadrillas que previamente preparaban sus
intervenciones parodiando, cantando y bailando, se les conocía con el nombre de
“comparsas” o “mojigangas”.
En Cádiz, el 4 de Febrero de 1834 se conoció un “Edicto” del
gobernador Pedro Nolasco Bassa con el que se pretendían conseguir que no se
cometieran excesos, recordando Bandos y Órdenes anteriores, y que sirvió de
modelo, con ligeras variantes, para años posteriores.
En 1845, el alcalde Antequera llegaría a ordenar el cierre
de las tabernas y puestos de bebidas desde las seis de la “noche”,
estableciendo, además que de día se sirviera “sin dar asiento a persona alguna”
para evitar que la gente se concentrara en las tabernas a beber y divertirse.
A medida que el Carnaval iba ganando libertad y popularidad,
las clases pudientes se fueron apartando de él.
No hay que olvidar que el Carnaval refuerza la conciencia de
clases y aumenta la tensión entre ellas hasta el punto de que la agresividad,
normalmente ritualizada, se manifiesta realmente.
Quizás por esto el Ayuntamiento gaditano no “reconocía” la
popular fiesta. Aunque en las cuentas municipales constan los ingresos por los
bailes públicos, en un informe realizado en 1847 sobre las fiestas no alude
para nada al Carnaval.
Sin embargo en el “Reglamento de las diversiones públicas en
la ciudad de Cádiz”, del mismo año 1847, aparecen dos artículos con
prohibiciones sobre el carnaval.
Mediado el siglo XIX el Carnaval había conocido ciertas
restricciones en Sevilla, puesto que por entonces el ayuntamiento sevillano
había comenzado a imponer una tendencia reglamentista, como en otras ciudades
españolas, con el fin de encorsetar las manifestaciones festivas, al tiempo que
disponía ciertos exornos, se contrataban bandas de música y actuaciones
circenses.
Mientras tanto, en la catedral de Sevilla los “seises”
intentaban desagraviar a Dios bailando ante los altares las tardes de Carnaval,
según relata Fernán Caballero en 1857.
En el siglo XIX el Carnaval malagueño conoció las
restricciones comunes a otras poblaciones.
Mientras la prensa elogiaba los bailes y las fiestas en las
mansiones de la aristocracia y burguesía malagueña, destacando las reuniones de
diferentes asociaciones, como el Liceo Artístico o el Círculo Mercantil, que
celebraban bailes de máscara. De forma paralela en espacios públicos, como la
Alameda Principal, diversas cuadrillas cantaban letras satíricas sobre asuntos
relacionados con la vida política y social de la ciudad y de la nación.
Lo mismo ocurría en Cádiz: Francisco Flores Arenas.
En Cádiz, en 1861, ante la imposibilidad de acabar con la
fiesta popular, las autoridades municipales decidieron controlarla.
El Ayuntamiento de Juan Valverde acordó que fuera el
Municipio el encargado de la organización del Carnaval. La iniciativa partió de
Miguel Ayllón Altolaguirre, quien propuso consignar en el presupuesto de 1862
una cantidad que permitiera iniciar la transformación deseada del Carnaval.
Con la medida se pretendían evitar los “excesos” arrojar
agua o polvos, y, sobre todo, el popular “saquillo”.
Casos similares: Valencia, La Coruña, Nueva Orleáns,
Veracruz, Río de Janeiro.
En el informe se dice que estaba comprobado que las
prohibiciones, incluso el castigo, eran inútiles para lograr desterrar las
tradiciones populares, y por lo tanto, para erradicarlas lo mejor era buscar
nuevas fórmulas de diversión que contribuyeran a cambiar las costumbres y a
encauzar las expresiones populares hacia las formas y fines deseados por la
clase dominante.
Entre las alternativas de diversión, se proponen los juegos
gimnásticos, los bailes públicos, los fuegos artificiales, las bandas de música
y la potenciación de las comparsas, contribuyendo el Ayuntamiento al exorno de
las calles.
La financiación municipal contribuyó a un mayor control de
las calles, encauzando y dirigiendo la diversión, al tiempo que se las dotó de
cierto esplendor con los exornos y con los actos organizados.
En 1884 el alcalde Eduardo J. Genovés publicó una Edicto en
el que volvía a repetir las restricciones ya conocidas, pero en esta ocasión
añadía unas normas nuevas relativas a los “cantares” carnavalescos, normas que
obligaron a las agrupaciones a proveerse de una licencia municipal, y a
presentar en el Ayuntamiento dos copias de las letras que pretendieren cantar,
sobre las que se inició un sistema de censura.
De esta manera, los sectores dirigentes conseguían
reglamentar –controlar- la expresividad popular.
En Isla Cristina desde mediados del siglo XIX se repiten los
bandos con normas restrictivas, destacando el que se trate de limitar la fiesta
a los tres días tradicionales, según “la antigua costumbre”.
La regulación de la fiesta ocurre a partir de 1876, cuando
en las Ordenanzas Municipales se integra al Carnaval en las “Festividades
Populares” reglamentando las celebraciones carnavalescas, tanto en el teatro,
como en la calle.
En Cádiz, a principios del siglo XX, y con el alcalde
Cayetano del Toro, la organización del carnaval se reforzó: iluminaciones y
exornos extraordinarios, bailes de máscaras, cabalgatas, concursos de máscaras
y de agrupaciones, fiestas infantiles, actuaciones callejeras y obras
benéficas, no faltaban nunca en la programación.
En Málaga, también a principios del siglo XX se dio una
nueva fase de “adecentamiento” de la fiesta por parte de la burguesía dirigente
desde la Sociedad del Clima y Embellecimiento de Málaga.
La década de los veinte y, sobre todo, los años de la
Segunda República fueron de gran esplendor en la celebración del Carnaval,
época de eclosión de la creatividad popular en las murgas y coros que
encontraron en los años de libertad republicana momentos de gran brillantez y
éxito entre los aficionados gaditanos.
En 1937, el 5 de Febrero, el bando franquista,
justificándose por las circunstancias que sufría España, que aconsejaban “un
retraimiento en la exteriorización de las alegrías internas”, se resolvía
“suspender en absoluto las fiestas de carnaval”.
La suspensión debía interpretarse como temporal.
Pero al terminar la guerra el carnaval siguió prohibido. El
Boletín Oficial del Estado del 13 de Enero de 1949 publicaba otra orden en la
que se decía:
“Suspendidas en años anteriores las llamadas fiestas del
carnval, y no existiendo razones que aconsejen rectificar dicha decisión, este
Ministerio ha resuelto mantenerla y recordar, a todas las Autoridades
dependientes de él, la prohibición absoluta de la celebración de tales
fiestas”.
Poco a poco, en algunas poblaciones se recuperó la fiesta.
Bielsa, Fuentes de Andalucía, Trebujena, Santa Cruz de
Tenerife, Vilanova y Geltrú…
Cádiz y las fiestas típicas
Recuperación a finales de los setenta o comienzos de los
ochenta.
Más de una generación transcurrió sin celebrar el Carnaval
en sus características peculiares.
La prohibición franquista del Carnaval y su ausencia durante
tantos años ha perjudicado a la fiesta tradicional.
La recuperación en los años ochenta ha supuesto una
renovación que en demasiadas poblaciones se ha realizado con una cierta
adulteración de sus principios diferenciadores básicos.
Se ha producido un fenómeno de mimesis con respecto a otros
carnavales célebres en muchos lugares, y en Andalucía de manera muy clara el
que podríamos denominar “modelo gaditano” impera por casi toda la comunidad.
En la actualidad el Carnaval de Cádiz ha superado
ampliamente las fechas tradicionales, que eran comunes a casi todos los
lugares: al miércoles ceniza, más el añadido del siguiente domingo, el Domingo
de Piñata.
De manera ue entre los inicios de los “ensayos generales” de
las agrupaciones, el concurso del Gran Teatro Falla y los diez días del
programa oficial de celebración –pregón, bailes de máscaras, concursos de
disfraces, cabalgatas…-, los gaditanos viven el carnaval cerca de dos meses.
El modelo gaditano se ha impuesto en Andalucía.
De las actuales manifestaciones carnavalescas, las de mayor
tradición son los bailes de carnaval, que proceden del modelo dieciochesco.
Las cabalgatas, que se celebraban hace más de ciento
cincuenta años.
Las agrupaciones, de las que es difícil establecer un origen
concreto, puesto que la música y el cante, en forma de letras paródicas,
satíricas, son intrínsecas a la fiesta.
Pero –insistimos-, aunque las expresiones festivas del
carnaval adoptan hoy multitud de formas en su celebración, gran parte de estas
expresiones han tomado como modelo a la programación del carnaval gaditano.
A la hora de analizar este fenómeno mimético conviene
insistir en que la prohibición de 1937 provocó la pérdida de la tradición
carnavalesca propia de cada localidad.
Tras la recuperación “descafeinada” del carnaval en la
ciudad de Cádiz, con la implantación de las Fiestas Típicas, lo cierto es que
entre los gaditanos se conservó buena parte de la tradición.
Igual ocurrió en Fuentes de Andalucía.
Y en Trebujena, con una celebración que cobró mayor fuerza
cuando en Cádiz trasladaron las Fiestas Típicas a Mayo, en 1967, mientras que
en Trebujena se mantuvieron las tradicionales fechas de Febrero.
El que hemos denominado “modelo gaditano” se sigue casi
escrupulosamente en muchas poblaciones: el cartel anunciador se selecciona
mediante concurso; la fiesta se anuncia con un pregón encargado a alguna
personalidad conocida –siendo de destacar que en los últimos años proliferan
por Andalucía como pregoneros reconocidos autores del carnaval de Cádiz; el
concurso de agrupaciones o las cabalgatas son también fenómenos comunes a casi
todos los carnavales andaluces.
El concurso de agrupaciones sea lo que más se ha copiado del
Carnaval gaditano, y, casi siempre, tras el concurso del Teatro Falla en Cádiz
los certámenes y festivales se multiplican celebrándose en Andalucía.
Otras “invenciones” gaditanas también se han copiado.
La Reina de las Fiestas Típicas y su corte de Damas –modelo
repetido a nivel infantil-figuras que fueron utilizadas, por otra parte, con
fines políticos-protocolarios, transformadas de forma poco comprensible se
cambia la denominación por la de “Diosa” y “Ninfas”.
Los carruseles de coros y agrupaciones.
Las “fiestas gastronómicas”, etc.
Es evidente que a lo largo de los años las expresiones
festivas han evolucionado, tanto como los gustos, pero lo que debemos lamentar
es que la aparición e introducción de nuevas formas de diversión se haga a
costa de la pérdida de tradiciones carnavalescas peculiares de las diferentes
poblaciones de Andalucía que tradicionalmente celebraban desde antaño el
Carnaval.
La continuidad de esta tendencia mimética pone en evidente
peligro, no la continuidad de la fiesta, sino los caracteres genuinos y
diferenciadores, la riqueza en suma, de las expresiones festivas y
carnavalescas de muchas poblaciones de Andalucía.
Fiesta:
Fenómeno social complejo
Acción simbólica multidimensional.
La fiesta es un complejo
cultural de carácter universal, puesto que lo encontramos en todas las
sociedades humanas, tanto del pasado como del presente. Es asimismo un fenómeno
social, más que individual; las llamadas fiestas familiares o de amigos –casi
todas espontáneas, organizadas sin periodicidad, más bien cuando interesan- no
entran en la consideración en un trabajo de recogida del Patrimonio Cultural.
La fiesta –como tiempo festivo-
es la celebración de un ritual; como tal cada vez está más considerada por la
mayoría de los científicos sociales como una situación excepcional, un
paréntesis en el acontecer diario, en el tiempo laboral; pero no por ello es un
tiempo menor, más bien al contrario, la fiesta se conforma como un fenómeno
sociocultural de capital importancia, pues en él aparecen reflejadas las
características propias de la sociedad donde se inscribe, tanto a niveles
simbólicos como reales.
Esto es, nos ofrecen los valores estéticos del grupo a través del baile, cante,
trajes, adornos, luces, casetas de feria, carretas, etc., junto a otros valores
de los que somos menos conscientes, pero que sin duda son muestra de una
estética popular extraordinaria, como la demuestra la situación de muchos
santuarios, los paisajes por los que discurren los romeros o la explosión de un
castillo de fuegos artificiales. De igual manera las fiestas, a excepción de
algunas ferias y carnavales, son rituales que poseen un componente religioso
tan inseparable que no permiten considerar la religiosidad popular sin las
fiestas y a éstas sin aquélla.
No en vano, las fiestas congregan, como ninguna otra
actividad o celebración, a los miembros de la comunidad -urbana o rural-, por
muy diseminados que se encuentren, en un espacio concreto –el espacio festivo-,
en el que las clases, los grupos de edad y los sexos se mezclan entre sí, al
tiempo que asimismo desempeñan sus roles y funciones, durante varias jornadas
(el tiempo que dura la fiesta). Lo más frecuente es que este espacio sea el
principal de la localidad, la plaza, el eje de la vida de pueblos y ciudades;
si bien también se ocupan calles y exteriores, como en las romerías –espacio
festivo ecológico- o las fiestas de moros y cristianos, que se emplazan en el
castillo, la playa, etc.
Fiesta/Economía
Términos no antagónicos
La fiesta es economía: dimensión económica de las fiestas.
“Economía festiva”
producción, consumo e intercambio de bienes y servicios,
generación de empleo, de circulación monetaria, de tratos y acuerdos
comerciales, inversión en capital social, convertible en actividades
lucrativas, que las fiestas propicias.
¿QUÉ REPRESENTAN?
Las fiestas constituyen una ocasión clarísima en la que los
aspectos económicos pasan a primer plano. Así se entiende, por ejemplo, que
las ferias se sitúen fundamentalmente al comienzo o al final de las épocas de
recolección, a veces, en una inflexión de la actividad agrícola. En cualquier
caso las fiestas requerían y requieren una planificación del gasto de la economía
familiar: los días de fiesta son siempre de dispendio, en la comida, en la
ropa, en el bar, en el arreglo de la casa, etc.
Tampoco son ajenos a las fiestas los aspectos políticos e identitarios,
entendidos como las actitudes que generan los sucesos de carácter general en la
comunidad, así como las relaciones entre grupos, entre comunidades y entre las
clases. Desde el ámbito institucional vale el ejemplo de la bandera e himno de
Andalucía: éstos fueron izada y entonado, por primera vez en muchos
Ayuntamientos, con motivo de las fiestas patronales (primeros de los años
ochenta). A través de las fiestas un pueblo puede profundizar tanto en
la identificación comunitaria –de grupos y clases, identidades locales y de
barrio- como en su diferenciación con otras comunidades, incluso de comarca y
región.
Finalmente, las fiestas constituyen la mejor
oportunidad, y en ocasiones la única, para que la vida social se desarrolle en
su plenitud; es decir, todas las personas conviven en espacios reducidos
(plazas, calles o casetas); además, regresan los emigrantes, se reúnen las
familias, se reagrupan las clases y se mezclan, al tiempo que también se
confirman los estatus –es decir, las diferencias-. Hasta no hace mucho tiempo
los cortijeros y huertanos, desparramados todo el año por las sierras o los
valles, se congregaban una vez al año en la cabecera municipal; por fin, al
menos una vez las familias aparecían unidas en público.
Como se observa, la fiesta es un reflejo de la situación
social, económica y política de la sociedad en la que se desarrolla, así como
de sus características culturales, estéticas, de sus valores, y de los cambios que
en ella se producen, aunque su reflejo no sea de una forma mecánica.
De entre las funciones que los antropólogos han podido descubrir en la
fiesta, destacan los siguientes: de ritualización de valores y fenómenos
sociales, de reforzamiento de situaciones existentes o inductoras del cambio,
de intensificación de la conciencia de clase, de promoción individual o
familiar, de liberación de los instintos, de proporcionar goce estético y afianzamiento
de la comunidad, a través del uso de ella como elemento de identificación,
etc., etc.
Esta última función –es decir, como elemento identitario- es ampliamente
compartida y generalizable a las fiestas populares. Podemos afirmar que tal vez
no haya un grupo humano, con conciencia de sí mismo, que no tenga su fiesta,
perfectamente distinguida de la de otros grupos; como tiene su patrón; aunque
la estructura del ritual festivo sea idéntica al de sus vecinos, y el patrón-a
el mismo-a, los lugareños de cada pueblo se identifican con su fiesta y su
patrón y los consideran únicos. En realidad, ambos –fiesta y patrón/a-
individualizan a la entidad; sin embargo, ello no contradice la existencia de
fiestas comarcales o regionales, sobre la base de devociones más amplias. En
Andalucía hay dos ejemplos muy significativos: la Virgen del Rocío (que
congrega en la aldea de Almonte, durante su romería, a más de un millón de
personas, la gran mayoría devotos- y la Virgen de la Cabeza, patrona de
Andújar, que congrega a medio millón de fieles en el cerro del Cabezo.
Esta idea de cohesión e identificación que producen las fiestas se apoya,
aparte de por los amplísimos estudios etnográficos actuales que ya poseemos,
los análisis que nos proporcionan los datos de historias y leyendas sobre el origen de
devociones, patronazgos y fiestas, de toda índole. El origen de numerosas
fiestas en Andalucía se encuentra en la aparición a alguien de una imagen
y su posterior actuación en favor de la comunidad concreta. Como consecuencia
de ello surge la devoción popular, la hermandad que se ocupará de su culto y
las celebraciones rituales y festeras en su honor; y, por supuesto, el
patronazgo canónico. Puede detectarse en varias de estas leyendas cómo el ser
sobrenatural distinguía y protegía a ese pueblo por encima de los demás,
salvándolo de una epidemia, de una guerra, invasión, incendio o de un sitio,
mientras comunidades vecinas sufrían estos azotes al no estar protegidos por
tan eficaz patronazgo.
Elementos conformadores del modelo festivo de la feria
andaluza:
-El Real: espacio público específico de la fiesta
-El Real: espacio público específico de la fiesta
-Casetas: lugares para convivencia festiva
-Luz y color: decoraciones luminosos, farolillos,
guirnaldas, pañoletas,…
-Baile y cante
-Vino
-Caballo
-Toros
-Protagonismo de la mujer.
Fusión de elementos y valores de carácter popular con los de
carácter burgués o incluso aristocrático: sevillanas, bulerías, verdiales,
trajes de flamenca, caballos, …”igualadores” formales de las desigualdades
sociales reales.
Ferias andaluzas: origen moderno y carácter plenamente
contemporáneo.
Ferias: fenómenos vivos
-Traducen y reproducen los procesos y los cambios que
afectan a las sociedades que las protagonizan.
-Algunos de esos procesos inciden de manera creciente sobr
ellas y podrían dar como resultado su expropiación por parte de actores e
intereses ajenos y la pérdida de su condición de fiesta:
comercialización consumista y masificación, subordinación a
su función como producto turístico, utilización para la promoción de la imagen
de “famosos” y “personalidades”, imposición de modelos uniformizadotes,…
El pueblo –como municipio o entidad local- es una unidad social indispensable
para la realización de las fiestas. No se olvide que la fiesta, a diferencia
del espectáculo, supone participación social –masiva, si se quiere-, aunque
ésta sea a niveles tan elementales como estar presentes, paseando o consumiendo
en un bar, restaurante o caseta de feria. La presencia multitudinaria del
pueblo anima por sí misma a muchas fiestas y el grado de participación está en
función de las instituciones organizadoras de la misma, así como de la
importancia de la fiesta, de su raigambre socio-histórica, de su valor
estético, etc.
Las formas de organización festiva –el llamado
piostrazgo ritual- básicamente son tres: las hermandades (para Semana Santa,
ciertas romerías), los Ayuntamientos -a través de las comisiones de festejos-
(ferias, fiestas patronales) y las mayordomías (muchas fiestas patronales,
cabalgatas, carnavales). El sistema de mayordomos se basa en el ofrecimiento de
una o varias personas o en la aceptación -ya sea por sorteo o designación- de
la responsabilidad de organizar, administrar, ejecutar, programar y, en
multitud de ocasiones- también de sufragar la fiesta. Existe un amplio abanico
de responsabilidades en el sistema de mayordomías, que va desde ser meros
ejecutores del fondo comunitario, hasta correr con todos los gastos que la
fiesta origine (o, al menos, garantizar su consecución, mediante la
organización de rifas, lotería, ayudas, subvenciones, aportaciones voluntarias,
publicidad en el programa de fiestas, etc.).
La existencia de hermandades complejiza el sistema de mayordomías, por
cuanto institucionaliza y mediatiza la participación directa del pueblo en las
actividades festivas, dándole a cambio una mayor seguridad y continuidad. Las
hermandades y cofradías que tienen plena vigencia en Andalucía organizan
fiestas públicas como parte de los actos en honor y exaltación de los titulares
de la hermandad. Esta titularidad corresponde en la mayor parte de los casos a
las diversas advocaciones de la Virgen o de Jesucristo. Las fiestas organizadas
por las hermandades complementan el calendario festivo de la comunidad y en
otros casos sustituyen o no dejan lugar para otras fiestas. Este último caso es
especialmente claro en aquellos pueblos donde existen dos hermandades que
compiten por la brillantez de los festejos. La competencia entre las dos
mitades en que se agrupa la comunidad lleva a efectuar gastos sustanciosos que
superan en mucho a poblaciones mayores y a ensanchar el calendario festivo en
dos ciclos alternativos, de mayor duración que en los pueblos en que esta división
no existe. En algún caso esta rivalidad simbólica queda superada,
temporalmente, por una fiesta de rango local que simbolice e identifique a la
comunidad en su conjunto.
Por último, el sistema de fiestas promovida por las Juntas o Comisiones
de festejos –desde dentro o fuera de los ayuntamientos- ofrece el menor grado
de participación popular en la programación y el control de las mismas,
participación que llega a ser prácticamente nula en ayuntamientos que –de forma
larvada- están dominados por oligarquías locales. Normalmente las Juntas o
Comisiones de Fiestas son organismos delegados de los Ayuntamientos en los que
participan también otras instituciones culturales o recreativas.
Frecuentemente han jugado un papel homogeneizador de las fiestas en perjuicio
de los rasgos tradicionales de la localidad, pero en cualquier caso suplen la
incapacidad o dificultad de vecinos y entidades para organizar los festejos.
Hay, desde las últimas décadas, un factor que creemos
muy importante en el desarrollo y organización de muchas fiestas, como son los
colectivos de emigrantes que vuelven a sus pueblos por vacaciones –y/o durante
las fiestas de su pueblo-. La emigración andaluza con una de las cotas más
altas de la Península ha producido efectos negativos en muchos órdenes; sin
embargo, las fiestas se han visto ampliamente beneficiadas. La reiterada
mención a los emigrantes en los programas de fiestas, la acomodación de los
calendarios festivos para facilitar la estancia de los emigrantes e incluso la
ampliación de las jornadas festivas, el aporte económico que realizan, son
argumentos suficientes para valorar la importancia de este fenómeno en relación
con las fiestas.
Sirva de ejemplo comprobar cómo en bastantes representaciones de moros y
cristianos de municipios poco poblados se mantienen gracias a que los
emigrantes encarnan buen número de los personajes.
Fuente: Manual Patrimonio Cultural
Día 8 de julio
CONFERENCIA. “La fiesta del Corpus en Andalucía”. Arturo Morgado García. Profesor titular de Historia Moderna de la Universidad de Cádiz.
“La fiesta del
Corpus en Andalucía”. Arturo Morgado García.
La fiesta del Corpus Christi aglutina a más de 100.000
personas en el Casco Histórico de Toledo, según estimaciones del alcalde de la
ciudad, Emiliano García-Page.
En declaraciones a los medios antes de asistir a la misa en
la Catedral de Toledo y participar en el desfile procesional, el alcalde se ha
mostrado "muy contento" de la afluencia de visitantes que ayer
registró la ciudad hasta altas horas de la noche.
Según ha manifestado,
la ciudad está "esplendorosa" y Toledo es una "síntesis
perfecta" de lo que ha sido España a lo largo de la historia, como se
podría decir que España es una "perfecta síntesis" de los avatares de
la historia en Europa entera.
En este momento, ha
destacado, el Corpus es una "síntesis perfecta" de lo que es Toledo,
de manera, que si se quiere conocer Toledo, a los toledanos y toledanas,
"creo que es imprescindible visitar el Corpus".
A su juicio, el hecho
de que haya "mucha gente" significa que el Corpus es una fiesta
"muy participada, muy sentida", por encima de ideologías y creencias.
El alcalde,
preguntado al respecto, también se ha referido al hecho de que María Dolores de
Cospedal desfile por primera vez como presidente de Castilla-La Mancha.
A esta cuestión, García-Page ha contestado que para la nueva
presidenta, María Dolores de Cospedal, debe de ser un día "muy
especial" y se ha mostrado seguro de que los toledanos la van a acoger con
"mucho cariño".
www.rtve.es.noticias
23 de junio de 2011
Breve historia.
*El Corpus es una fiesta que en su origen tiene poco de
popular.
*Exalta la presencia real de Cristo en la Eucaristía (la
transustaciación), creencia que se va consolidando en el siglo XIII.
*El orígen de la fiesta se sitúa en las visiones de Juliana
de Rétine (Santa Juliana de Lieja), beguina belga del siglo XIII, que tuvo una
revelación privada en la que Cristo le pedía la institución de una fiesta de la
eucaristía. Una visión le era particularmente presentada, en la cual veía una
luna oscurecida, es decir, resplandeciente, pero incompleta, una banda negra la
dividía en 2 partes iguales. Veía en ello que faltaba una fiesta en la iglesia.
*La creencia fue reforzada por la aparición de milagros
eucarísticos, como el de Bolsena (1263)
En la bula Transiturus de hoc mundo (1264) de Urbano IV se
extiende a la cristiandad la celebración del Corpus.
En el Concilio del Vienne de 1311 Clemente V dará las normas
para regular el cortejo procesional en el interior de los templos, e incluso
indicará el lugar que debieran ocupar las autoridades que quisieran añadirse al
desfile.
En el año 1316 Juan XXII introduce la Octava y exposición
del Santísimo Sacramento. Pero el gran espaldarazo vendrá dado por el papa
Nicolás V cuando en la festividad del Corpus Christi del año 1447, sale
procesionalmente con la Hostia Santa por las calles de Roma.
Y el Corpus inspiraría a Tomás de Aquino para escribir el
Punge lengua.
Pange, lingua, gloriosi
Córporis mystérium
Sanguinísque pretiósi,
Quem in mundi prétium
Fructus ventris
generósi
Rex effúdit
géntium.
Nobis datus, nobis natus
Ex intácta Vírgine,
Et in mundo conversátus,
Sparso verbi sémine,
Sui moras incolátus
Miro clausit órdine.
Desde el siglo XIV hay noticias de la celebración de una
procesión: Auvignon (1314), Barcelona (1322).
*En España el Corpus se difunde a través del camino de
Santiago y desde la corona de Aragón.
*En todas partes se cita una procesión y representaciones
teatrales con finalidad doctrinal.
*A partir del siglo XVI la Iglesia insiste mucho en su
celebración, ya que la presencia real de Cristo en la eucaristía es negada por
los protestantes (cofradías del Santísimo Sacramento).
Las constituciones sinodales estipulan incesantemente que se
festeje el día señalado “con gran solemnidad” y “procesión solemne”, para lo
cual concedieron importantes gracias e indulgencias a los fieles y ordenaron a
los religiosos de todas las iglesias que asistiesen a ella “las puertas de
todas las iglesias abiertas, tañendo las campanas y cantando con voz alta”
(Ávila, 1481).
*Suscita gran devoción: “ese mismo año (1692) día del Corpus
mientras estaba toda la procesión por las calles llovió muchísimo y obligó al
señor obispo y al señor gobernador a hacerla guarecer en la casapuerta de Don
Diego Barrios de la Rosa quien al instane con mucho fervor cristiano bajó con
muchas hachas encendidas a recibirla e hizo llevarla adorándola con mucho
fervor”
Apoyo económico de los municipios a su celebración.
*Perjudicado en el siglo XVIII con la crítica de los
ilustrados hacia la religiosidad popular. Actitud de los ilustrados a la
fiesta.
“Las procesiones son extravagantes. Llevan figuras de
gigantes y monstruos que prueban que la caballería y lo maravilloso son la base
de todos los milagros de los santos cristianos, como las conquistas, las
aventuras, los gigantes y monstruos vencidos son las hazañas que los paganos
atribuían a sus semidioses.
Se ven en esas procesiones mascaradas de angeles, de
demonios, de santos y de apóstoles. Todas esas señales de superstición no se
ven ya en el resto de Europa sino con indiferencia y desprecio, como viejos
abusos que dejaron subsistir por política, porque son espectáculos que atraen y
ocupan al pueblo, cuyo concurso ocasionan circulación de dinero que produce un
beneficio real a cada ciudad que tiene la dicha de tener una procesión famosa”.
La cédula de 20 de febrero de 1777 ordenaba a corregidores y
justicias que no permitiesen las procesiones nocturnas, los disciplinantes,
empalados ni otros espectáculos de nula edificación, sino que “pueden servir a
la indevoción y al desorden en las Procesiones”. De la misma forma se
proscribían los bailes en las iglesias, sus atrios y cementerios, ni delante de
las imágenes de los santos. “guardándose en los Templos la reverencia, en los
atrios y cementerios el respeto, y delante de las imágenes la veneración que es
debida”.
Esta orden alcanzó naturalmente a las danzas del Corpus, que
en distintos lugares fueron moderadas o prohibidas. En Granada se vedó que
entrasen en las iglesias las danzas de mujeres, hombres y diablillos que
acompañaban a la procesión y para lograrlo se reguló la asistencia de tropa
militar.
Retomado en el siglo XIX por parte de la Iglesia.
Cádiz: Juan Valverde (1861).
Diario
de Cádiz 13 de mayo de 1934.
El Ayuntamiento de Cádiz subvencionará con 15.000 pesetas
los gastos de las próximas fiestas de Corpus. Esa cantidad estará destinada
únicamente a subvencionar los gastos de fluído eléctrico y la corrida de toros.
En la correspondiente sesión municipal se leyó un escrito de la minoría
socialista solicitando que el Ayuntamiento se opusiera a la celebración de
estos festejos, dado el carácter laico de la República. Otros concejales, por
el contrario, expusieron que abonar algunos gastos no suponía apoyar la
celebración religiosa del Corpus, sino colaborar con unos festejos organizaos
por una iniciativa popular.
Los
concejales socialistas insistieron en su negativa, opinando que la Constitución
prohibe patrocinar fiestas religiosas. Los demás concejales también insistieron
en sus argumentos considerando que el Corpus es una fiesta popular. Finalmente
con el alcalde, Manuel de la Pinta, se aprobó subvencionar las fiestas con
casetas. Con las salvedades anteriormente expuestas.
La celebración se lleva a cabo el siguiente jueves al octavo
domingo después del Domingo de Resurrección, aunque donde no es precepto se
traslada al domingo siguiente.
*Es fiesta oficial en Austria, partes de Alemania y España,
Hungría, Brasil, República Dominicana, Bolivia, Colombia, Croacia, Polonia,
Portugal, Perú, Venezuela y Ecuador.
*En España lo habitual es celebrarlo el domingo siguiente,
como en Cádiz o Málaga, salvo en los lugares donde existe una gran tradición o
coincide con las fiestas patronales, siendo este el caso de Sevilla y Granada.
Corpus en Vaduz (Liechtenstein).
Descripciones de la fiesta.
Corpus en Jaen en el siglo XVII:
Días antes de la procesión se realizaba en cabildo el sorteo
de las varas de palio entre caballeros veinticuatro”(concejales)” para los tres
trechos en que se distribuía el itinerario”.
“El ayuntamiento obligaba a los vecinos(…) a limpiar la
parte de calzada que le correspondía, mientras que él se encargaba de entoldar
dichas vías”
“En la procesión religiosa se integraban conjuntos profanos
que hacian de aquella una manifestación folklórica y lúdica. Nos referimos a
tarasca, danzas y diablillos.
Intimamente relacionadas con la leyenda del lagarto de La
Magdalena está la tarasca, monstruo que no faltaba en las procesiones del
Corpus de otras muchas ciudades”.
“En la procesión solían ir cuatro danzas contratadas (…) que
pertenecían casi siempre a las minorías marginadas, moriscos, gitanos”.
“Los diablillos eran comparsas de mozos que se disfrazaban
según el papel que representaban; eran los más ruidosos y alborotadores en la
procesión tanto que en 1683 el caballero veinticuatro Antonio de Quesada Monroy
propuso su supresión por los desórdenes que causaban y lo impropio que era en
una procesión religiosa. No debió de tener éxito este capitular porque el
público estaba de parte de los diablillos dado el desenfado con que actuaban”.
Elementos de la fiesta.
*Se incorporan elementos profanos a la procesión, como la
tarasca que solía encabezarlas, junto a gigantones y gigantillas, ángeles y
evangelistas, animales, diablillos y judíos, danzas y carros con
representaciones alegóricas.
*Buena parte de estas figuras tienen un carácter monstruoso,
ya que se tiende a hacer una alegoría de la deformidad moral, el pecado, a
través de la deformidad física de los monstruoso.
Gaudí en la procesión del Corpus (1924).
La misa en la catedral.
En Sevilla los seises (que son diez) realizan tres danzas,
la primera al Santísimo, la segundo al arzobispo, la tercera al ayuntamiento.
Visten de rojo en el Corpus y de azul en la Inmaculada.
En Granada los seises se han recuperado recientemente.
Los seises en Cádiz fueron una figura tradicional de la
procesión del Corpus hasta mediados del siglo pasado, aunque han sido
recuperados recientemente. Eran niños elegidos por su buena voz y compaginaban
el canto con la tarea de ayudar a los canónigos de la Catedral.
Vestían
sotanilla roja y sobrepelliz blanca. La tradición ordenaba que durante la
procesión del Corpus, los seises cantaban en cinco lugares diferentes: a la
entrada de la calle Cobos, en la calle Cristóbal Colón frente a la Casa de las
Cadenas, al final de la calle Nueva, frente al Ayuntamiento y ante la Capilla
del Pópulo.
Pasos del Corpus en Sevilla: Santa Angela de la Cruz, Santas
Justa y Rufina, San Isidoro de Sevilla, San Leandro, San Fernando, La
Inmaculada Concepción, el Niño Jesús, la Santa Espina, el Santísimo Sacramento.
*Las representaciones figuradas: tarascas, etc.
Por ejemplo, en Granada, donde cada miércoles la tarasca, un
maniquí que se supone viste la ropa que estará de moda en esa temporada, se
pasea por la ciudad a lomos de un dragón. Es el contrapunto pagano de la fiesta
religiosa.
La Custodia.
La Doncella ( Santa Marta) lleva atada a la Tarasca en la Procesión de Tarascón
La tarasca
La tarascas solía tener la apariencia de un reptil, un pez o
un anfibio, un animal que se asemejara al dragón. El jesuita Martínez de la
Parra hacia derivar el término de Theracca (espantar, poner miedo).
La mayor parte de los autores, empero, lo asocian con la
localidad provenzal de Tarascón, donde se sitúa la leyenda de Santa Marta, la
hospedera de Cristo en el Evangelio, que vio a un ser mezcla de animal
terrestre y de pez, consiguiendo reducirla y que los lugareños la mataran a
pedradas.
En la procesión simbolizaría el triunfo del Santísimo
Sacramento sobre sus enemigos.
Los gigantes o gigantones, que desfilan y bailan en parejas.
Se suele decir que representan a los vicios que huyen del Santísimo sacramento.
Pero tenderán a ser considerados con el tiempo como mero entretenimiento.
Gigantes en el Corpus de Granada.
Gigantes en Cádiz (ca. 1930) representando a Alfonso X el
sabio y su esposa.
*Las calles ornadas de flores, lo que evoca la imagen del
jardín (naturaleza ordenada) como sinónimo del Paraíso.
En Zahara de la Sierra se adornan las calles cubriendo con
los eucaliptos, adelfas y flores las paredes de las casas y esparciendo por el
suelo la juncia, sobre los ramos se ponen colchas, encajes o mantones.
Marmolejo. Jaén.
Los altares ubicados en las calles: sacralización del
espacio urbano.
Altar en Málaga.
Altar en Zahara de la Sierra.
Los estudios realizados tienen un carácter descriptivo.
Faltan planteamientos:
*Sectores sociales interesados en la fiesta.
* Qué intereses sirve.
* Cuáles son los elementos que encontramos.
CONFERENCIA. “Vírgenes de fiesta”. Pedro Antón Cantero Martín. Antropólogo (universidades de París y Burdeos). Profesor de Antropología de la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla). Investigador del G.I.S.A.P.
Vírgenes de fiesta
El culto festivo como júbilo, reafirmación y simulacro
Factores básicos
-Sentido (celebración)
- Estimulante (entusiasmo)
-Gentío (masa festiva)
-Ruptura (tiempo de fiesta)
-Gratuidad (don de nada)
-Margen (espacio festivo)
El don de nada
-Según Duvignaud, aquellas actividades festivas que revelan
exceso de dinamismo o de vitalidad distinguen al hombre de la bestia:
simbolismo, juego, trance, risa y, sobre todo, el don que, despojado de
nuestras ideas de negociio, es un sacrificio inútil, el don de nada, la mejor
parte del hombre.
La fiesta efímera
La fiesta no puede ser un estado permanente o que se
reconduce cada fin de semana. Para ello tendríamos que ayudarnos de drogas que
nos desinhibieran y que nos exultaran hasta alzarnos de nuestra apocada
condición.
Algo quimérico e insostenible como lo es el pensar que se
puede vivir en un gozo perpetuo o en una permanente felicidad. Si la felicidad,
el gozo o la exultación son posibles es porque son efímeras y, en cierto modo,
imprevisibles.
La fiesta
-Necesita un sentido,
-Una masa,
-Un tiempo,
-Un espacio
- y un estimulante excepcional.
Religión
-Es “la observancia cuidadosa y concienzuda de […]. Sea cual
fuere su causa, lo numinoso constituye una condición del sujeto, independiente de
su voluntad. […]
Lo numinoso es, o la propiedad de un objeto visible, o el
influjo de una presencia invisible que producen una especial modificación de la
conciencia”.
•Jung: Sicología y religión.
Júbilo compartido
•El entusiasmo hará que cualquier individuo se sienta
enardecido, iluminado en lo más hondo a través de un júbilo que embarga el ser,
tanto más sentido cuanto ese júbilo es compartido por la multitud.
El entusiasmo como posesión
• “las sacudidas de los nervios, la dilatación y el
encogimiento de los intestinos, las contracciones violentas del corazón, la
ascensión precipitada de las llamaradas que desde las entrañas suben al cerebro
cuando nos sentimos violentamente afectados”
•Voltaire, Diccionario filosófico.
Toda masa
• Obedece a leyes e impulsos que le son propios. Ávida de
evento o exangüe tras su culminación, se mueve por la gravitación de un foco de
referencia; sus componenetes, llevados por la alteración de la conciencia,
basculan como partículas de un astro poderoso que fluyeran para densificarlo y
no tener otra razón de ser. La masa opera un cambio radical en el
comportamiento de sus integrantes, una alteración de la conciencia, tan
apremiante como enigmática.
Las fiestas a la Virgen a la Virgen en Andalucía
•Logran que el simulacro sea una vivencia tan radical como
única.
•Ese es parte esencial del don de nada, parte esencial
porque es una vivencia colectiva.
•Pero si la masa, el don de nada y el entusiasmo son
factores determinantes de la fiesta hay al menos otras dos dimensiones que me
parecen importantes para ue una fiesta se de: tiempo y espacio.
El tiempo de fiesta
• Se inscribe como una pausa-cuando no en una ruptura- en el
tiempo económico, sus pende el ensarte rutinario de los trabajo;
• tiempo fuera del orden de la producción, aun si libre y
fugaz, espejo de un tiempo infinito que será festivo, sin límite ni apremio.
-La fiesta implica un paréntesis de euforia colectiva, un momento señalado de celebración, gratuidad, gracia y desarreglo.
El espacio de la fiesta
Es cuanto menos paradójico, pues amén de que sea lugares más
o menos investidos, lo que hace de tal espacio el lugar de la fiesta es el
hecho de que alli se congregue la muchedumbre festiva.
Es la masa la que constituye el lugar.
El lugar no existe fuera del uso, habitar crea lugar; de lo
contrario, es un sitio admirable o trivial, pero no un lugar.
Lo que lo hace idóneo para la fiesta es su forma de
habitarlo.
La romería, fiesta total
Probablemente de todos los cultos festivos a la Virgen sea
la romería la que reúna las condiciones óptimas para la fiesta, pero hay una
que, a mi punto de ver, las convoca de un modo fenomenal, tanto por el gentío,
como por la efervescencia, la entrega, la amplitud de sus tiempo y la
diversidad de sus espacios.
La romería de El Rocío, es la fiesta grande de Andalucía.
El Rocío
Fiesta por excelencia, lo es por ser local y universal,
magmática y celular, colectiva y personal, desprendida y fraterna.
He vivido innumerables fiestas, pero solo en el Rocío he
encontrado esta desmesura, esa coagulación de entusiasmo que permite el
encuentro entre lo bestial y lo sobrenatural.
En ella se da como en pocas la conjunción de entusiasmo, la
reciprocidad, la ruptura temporal
espacial.
Entusiasmo
• El Rocío es a la vez acto religioso y orgiaco que implica
inmersión magmática y vínculo personal con la imagen, alborozo colectivo y
devoción, entusiasmo y ascesis.
La devoción bulliciosa no es antinómica de la devoción
silenciosa sino tan solo su otra cara; una y otra se complementan, forman parte
del todo religioso, como oruga y mariposa.
Paradoja tan solo aparente la del bullicio y la devoción,
pues la relación con la divinidad reviste formas diversas y la orgiástica es
universal y efectiva. Lo propio de la fiesta multitudinaria es la efervescencia
afectiva; al ser el sentimiento el sustrato de lo religioso.
Gratuidad
•El don de nada, no es un mero intercambio sino una
inmersión en el dar y recibir y volver a dar según una lógica distinta al mero
intercambio.
•Reciprocidad e intercambio como dos principios
fundamentalmente distintos.
Reciprocidad e intercambio
La reciprocidad como un principio se´gun el cual una
relación entre dos o más grupos y personas se producen invirtiéndose (en la
reciprocidad de dones, la relación de donador a donatario se invierte de tal
manera que el donatario se vuelva donador y el donador donatario).
Y el intercambio como el simple cambio de un producto por
otro (en la compra-venta por ejemplo, el vendedor no se vuelve comprador e
inversamente, no es la relación que importa, sin la satisfacción personal que
implica la adquisición del producto).
El don de nada
• El don de nada, como forma exaltada de reciprocidad, me
parece fundamental en El Rocío, pues nos hace vivir un auténtico paréntesis de
país de jauja en el que cada individuo es apéndice dinámico de una comunidad
idílica.
La temporalidad
Los tiempos de El Rocío hacen posible que emerjan momentos y
eventos, sentimientos y sensaciones que no se darán en un tiempo más recogido.
Todo cabe en El Rocío. Tiempos de espera, tiempos de
previsión, tiempos de cachondeo, tiempos de emoción, tiempos de orgía, tiempos
de entusiasmo, tiempos de recogimiento, tiempos de desmadre. Los bautizos con
agua del Quema y los bautizos con vino de la tierra.
Simulacro excepcional
Prodigio de excepcional gratuidad en el que se comparte el
fervor en una entrega gozosa, se comparte el espacio a la inversa de
aislamiento segmentado de la contemporaneidad; se comparte el deseo –pujanza
erótica tanto más densa cuanto que imprevisible, desordenada y fugaz_; se
comparten viandas, como forma de comunión solidaria –riqueza de manjares y
cuidados que se prodigan al prepararlos.
En definitiva se vive un simulacro excepcional. Pese a vivir
en plena civilización de ocio y tener todo el año muchas ocasiones de
diversión, esta romería sigue siendo, más que otro cualquiera un gran momento
de efervescencia festiva.
Cata Técnica de Cerveza ofrecida por la Fundación Cruzcampo, empresa patrocinadora del Seminario.
CRUZCAMPO
Ingredientes
Cruzcampo Pilsen es una cerveza tipo Lager y estilo Pilsen ,
que solamente utiliza ingredientes naturales como malta de cebada, lúpulo, maíz,
agua y levadura.
Ficha de catado:
Es una cerveza tipo Lager y estilo pilsen de color rubio
pajizo, y espuma consistente blanco marfil, su ligero aroma frutal a manzana
madura, destaca sobre su sabor balanceado de dulce de malta y amargor suave. Su
paso en boca es de una cerveza con cuerpo ligero y un final amargo refrescante.
Graduación alcohólica: 4,8% en volumen
Temperatura de servicio: 0-3ºC.
Buena alternativa para compañar la cocina en “miniatura”
como pueden ser aperitivos, pinchos y tapas. También nos ofrece la posibilidad
de acompañar esta cerveza con cualquier tipo de plato a la hora de sentarnos a
mantel. Platos tales como ensaladas aderezadas con vinagres por muy nobles que
sean la cerveza lo soporta bien, con mostazas, escabeches, salazones, carnes
blancas, pescados plancha, barbacoas y quesos poco curados. Ideal para
embutidos con presencia de picantes o pimentones dulces.
Ingredientes
Utiliza en su elaboración ingredientes seleccionados de
extraordinaria calidad, malta pilsen de cebada, lúpulo, agua y la exclusiva
levadura Heineken de fermentación baja, que se distribuye desde Holanda a los más
de 70 países donde se elabora.
Ficha de catado:
Es una cerveza de tipo Lager y estilo lager claras de color
amarillo claro y brillante, y una espuma blanca intensa, cremosa y persistente
en el vaso, dejando claros anillos a medida que se consume. Su aroma frutal a
plátano procedente de su fermentación lenta a baja temperatura, perdura hasta
el consumo final mezclándose con el ligero sabor dulce de la malta pilsen y su
amargor suave.
Es una cerveza seca de cuerpo ligero con buenpaso de boca,
que proporciona un final amargo muy fresco y nada astringente al finalizar su
consumo.
Graduación alcohólica: 5% en volumen
Temperatura de servicio: 0-3ºC.
CRUZCAMPO LIGHT
Ingredientes
Cruzcampo Light, es una cerveza tipo Lager y estilo Pilsen
con los mismos ingredientes que la Cruzcampo Pilsen pero con un 30% menos de
calorías.
Ficha de catado:
Es una cerveza de tipo Lager, estilo light o ligero, con
aroma frutal y sabor balanceado de malta y amargor suave Su paso por boca es
refrescante del paladar, por su amargor suave. Cerveza de cuerpo ligero con
final muy refrescante, y más agradable al percibir la sensación de consumir una
Cruzcampo pilsen con 30% menos de calorias.
Graduación alcohólica: 2,4% en volumen.
Temperatura de servicio: 0-3ºC.
Maridaje: Acompaña de maravilla como aperitivo y con
cualquier tipo de plato: ensaladas, carnes blancas. Ideal para la cocina
japonesa por su complejidad y lo natural de sus ingredientes bajos en calorías.
Imprescindible como acompañamiento de fritos, soporta bien los aderezos (vinagres,
mostazas, aceites) y notas ácidas. Refresca y alivia en boca notas “picantes”.
PAULANER HEFE-WEISBIER
Ingredientes
La cerveza Paulaner de Trigo, esta elaborada con los
siguientes ingredientes 60% de trigo malteado y 40% de malta de cebada, con lúpulos
seleccionados, agua y la levadura Paulaner de fermentación alta.
Ficha de catado:
La cerveza Paulaner de Trigo es una cerveza de tipo Ale y
estilo de trigo alemana, turbia de color dorado con una tonalidad blanquecina
profunda que inunda todo el vaso. Presenta en su servicio una espuma blanca
marfil de consistencia ligera pero persistente que sobrepasa los límites del
borde del vaso manteniéndose firme hasta el final por la vivacidad manifiesta
en esta cerveza. Su aroma a especia de clavo inunda toda la nariz marcando el carácter de esta cerveza. Su
paso por boca resulta muy agradable por
el excelente balance de dulce de pan, amargor herbáceo y volátiles procedentes
de una fermentación alta generosa y la
presencia de levadura que aporta gran cantidad de vitaminas, minerales y proteínas,
que redondean su sabor.
El final es de una cerveza muy seca que te refresca
profundamente y deja un recuerdo chispeante frutal a guindas duradero en la
boca.
Graduación alcohólica: 5,5% en volumen
Temperatura de servicio:2-4 ºC.
Maridaje: Posee la
mezcla perfecta de aspereza y dulzor para servirse con postres y frutas. Asimismo
por su frescura, es muy adecuada para tomarla como aperitivo o acompañando a
ensaladas donde haya presencia de hierbas frescas o especias.
Por contraste acompaña el Ragut de verduras con alcachofa,
endivia o espárragos.
Ingredientes
Hay que servirla en 2
tandas, esperando entre cada una unos cinco minutos, para que la espuma vaya
bajando. Si lo haces así estará mucho más suave y podrás captar todos los
aromas, que son muchos.
La cerveza Guinness es una cerveza tipo Ale y de estilo
Stout, elaborada exclusivamente con ingredientes naturales como son agua, malta
pilsen, cebada tostada, lúpulo y la exclusiva levadura Guinnes.
La cerveza Guinness de Barril constituye el 90% de las
ventas de esta marca en el mundo.
Ficha de catado:
Es una cerveza característica por su color negro rubí y su
espuma cremosa y blanca marfil, posee aroma a café torrefactado.
Combina muy bien con su sabor intenso y suave a la vez a
nueces amargas. Su paso por boca es limpio, rápido de una cerveza seca y cuerpo
ligero, dejando un final de regaliz amargo muy agradable.
Graduación alcohólica: 4,2% en volumen
Temperatura de servicio:2-4 ºC.
Maridaje:
Tradicionalmente se le conoce como uno de los mejores acompañantes
para el marisco especialmente para las ostras.
Es la mejor cerveza para acompañar chocolate amargo y
postres. También para acompañar unas perdices con chocolates.
Se puede conseguir maridaje por contraste, acompañando el
queso blanco tipo Burgos o con los
quesos tipo gorda.
Otras utilidades:
Este tipo de cervezas da mucho juego en la elaboración de cócteles,
siendo un clásico el Ángel Negro.
Como ingrediente en la cocina se ha emplead con éxito en:
-Lacón a la Scout.
-Helado de regaliz con Guinness.
Por contraste con el queso fresco de burgos y el queso tipo
Gouda. Para los mas atrevidos una receta de tarta de chocolate Guinnes. y en cócteles
también se le conoce en la bebida Angel Negro.
DESPERADOS
Ingredientes
Es una cerveza innovadora de tipo Lager y estilo de cervezas
especiales elaborada con ingredientes naturales, como malta de cebada, maíz,
jarabe de glucosa, extracto de lúpulo y aromas naturales de tequila.
Ficha de catado:
Desperados, es una cerveza de color amarillo dorado, limpio
y muy transparente que al servirla presenta una espuma abierta y efímera que
desaparece rápidamente. Su aroma limpio y perfumado a tequila. Su sabor es
seco, agradable y refrescante con matices amargos, con un buen paso por boca.
Su cuerpo es ligero dejando un final dulce en el paladar con abundante aroma
frutal.
Graduación alcohólica: 5,9 % en volumen
Temperatura de servicio:
2-4ºC.
Maridaje:
Por la frescura y afinidad de sus componente, se recomienda
para acompañar platos picantes y bien condimentados, ya que ofrece su perfecto
contrapunto, refrescando y aliviando el paladar. Por contraste, con el queso
azul.
Otras utilidades:
Por la complejidad de esta cerveza la podemos utilizar como
ingrediente en la elaboración de vinagretas de limón y cerveza, para macerar
carnes de pollo y posterior empanado o en coctelería por su carácter fresco y
notas mexicanas.
En su utilización como ingrediente, tenemos los siguientes
ejemplos contrastados.
-Ensalada de langostinos con vinagreta de limón y cerveza.
-Lagrimitas de pollo al desperados y mostaza, con salsa de
lima y jengibre.
-Bloody Mary de cerveza y cintas de chocos marinadas.
-Cóctel de Cerevisia.
Día 9 de julio
CONFERENCIA. “Las cruces de mayo en Andalucía”.
David González Cruz. Catedrático de universidad de Historia Moderna de la Universidad de Huelva. Premio. Director Científico de los Encuentros Iberoamericanos de Religiosidad y Costumbres Populares, Miembro de la Red Española de la Cátedra de Historia de Iberoamérica (OEI).
Significado de las Cruces de Mayo Pervivencias del latir céltico: Mayos. Festividad de los Mayos
El árbol de mayo en un cuadro de Francisco de Goya.
La Festividad de los Mayos, también conocida como Los Mayos simplemente o como Fiestas de Mayo, es una fiesta popular de orígenes ancestrales. Esta celebración primaveral generalmente se hacía coincidir con el primer domingo de dicho mes y tenía antiguamente connotaciones rituales totémicas a la divinidad primaveral o de los árboles que se han ido perdiendo con el paso de los tiempos. La celebración de las fiestas mayales es común en muchos países de Europa donde existen variantes similares de la misma festividad Andalucía.
En Sabiote (Jaén) se realizan en honor a la patrona, la Virgen de la Estrella. También se celebran en Baena (Córdoba), donde reciben el nombre de cruces.
En Castro del Río (Córdoba), muy cerca de Baena, es típico celebrar la fiesta de las cruces de mayo adornando casas, rincones y plazas con cruces hechas de manzanilla.
En unos pocos lugares también se hacen hogueras.
Las romerías o procesiones entroncan esta festividad con que mayo es para la iglesia el mes de María.
El mes de mayo es un mes plenamente primaveral y de la celebración de la plena entrada de esta estación vendrían estas fiestas tradicionales.
Las cuatro grandes fiestas célticas según el Calendario de Coligny son el Samain, Imbolc, Beltaine y Lugnasad:
Beltaine, etimológicamente significa “Fuego de Bel”, es el final del invierno y el comienzo del verano. “De ahí los ritos del fuego, particularmente abundantes y la sacralización de la vegetación naciente…la fiesta de Beltaine es una apertura a la vida y la luz, una introducción en el universo diurno, en lo que todavía se llama en Bretaña los -meses negros-”
Esta fiesta sería propiamente sacerdotal y sería costumbre plantar ramas en los campos, huertos y sobre los establos como símbolo de prosperidad y abundancia, siendo en los países germánicos la noche de Walpurgis.
Las celebraciones en torno al mes de mayo persisten a lo largo de toda Europa, si bien ha pasado a ser considerada por antropólogos y etnógrafos como una fiesta eminentemente agraria, conocida como los Mayos.
“Os Maios”, que así denominan en Galiza, son fiestas de carácter eminentemente agrícola, celebrados no solo en el noroeste peninsular, sino a lo largo de toda la península ibérica bajo múltiples formas, que en esencia simbolizan lo mismo como las Cruces de Mayo en Andalucía, especialmente en Córdoba.
Esplendor de la primavera, esperanza y “propiciando” buena cosecha, al mismo tiempo que alejando todo ser (visible o invisible) que pueda dañar la fecundidad de los campos.
Estos “Maios”, antiguos cultos o rituales agrarios (hoy en día fiestas folklorizadas), fueron objeto de denuncia y persecución por la Iglesia, puesto que en Concilios como el de Braga en el 570 o el de Lugo en el siglo VIII, se condenaron estas “prácticas” de culto fitolátrico.
Como sabemos, el mes de Mayo pasó a ser el mes de las flores, el mes de María.
Las condenas se extendieron también en la edad media, donde por ejemplo en Portugal, en 1385, la cámara de Lisboa acordaba que “Nâo se cantem Mayas nem Janeiras”.
El cabildo compostelano igualmente prohibía entrar en la catedral a las “maias” y “demiños”, bajo pretexto de lo indecente de sus danzas y canciones. Hay siempre dos elementos principales en torno a esta celebración europea de los Mayos.
Encontramos por un lado el Árbol de Mayo y por otro los Reyes del Mayo. Naturaleza y Hombre/Mujer, son símbolos en este ancestral recuerdo del triunfo de la primavera, ya que como nos recuerda el maestro V. Risco, esta estación del año siempre “significa el reverdecer de las plantas, el comienzo del año agrícola, la alegría de ver levantarse el sol por encima del horizonte y coger fuerza; y tiene diferentes formas: árbol de Mayo, hombre cubierto de ramas, armadilla de verduras y flores, reina de mayo, pareja de mayo, cruz de mayo, engalanar las casas con ramas, esparcirlos por los campos, presagios de hartura y dinero…
” En las diversas comunidades de etnia y lengua alemana, los “mayos” son igualmente celebrados análogamente que en otras zonas de Europa, así pues observamos que “En el folklore, este triunfo de la primavera tiene como símbolo la guirnalda primaveral (Ernte-kranz, en alemán, literalmente “corona de la cosecha”) que se entrega a la joven pareja del “Rey de mayo” y a la “Reina de mayo” para ser colocada la corona triunfal en lo alto del mástil de los festejos, el “Palo o Polo de Mayo”, símbolo del Árbol de la Vida y del Eje que une Cielo y Tierra.
Se trata de una corona vegetal que, con su verdor, su belleza y lozanía, su brillo y su aura alegre, proclama la Victoria del Sol y de la vida renacida…
Esa guirnalda primaveral es como el gran anillo floral que sella el enlace nupcial entre el Príncipe (el hombre o la humanidad) y la Princesa (la Naturaleza). No queda sino añadir que dicha corona verde y florida viene a corresponderse con la Rad-kreuz (rueda solar, cruz céltica)…
En ambos se expresa la misma idea de totalidad y armonía, de vida centrada en torno a la luz.”
La costumbre cristanizada de la bendición de los campos y establos, de los animales que sustentan al hombre en sus duros trabajos agrícolas, e inclusive de bendición de aguas (recordemos la festividad de la Virgen del Carmen) como hemos podido observar a lo largo de este artículo, tienen sus lejanos ecos en las antiguas tradiciones paganas europeas.
Pintura de la Galeria Nacional de Arte Washinton, 1495.
Religiosamente, parecen tener su origen en el hallazgo por Santa Elena de la cruz donde murió Cristo, pero lo cierto es que el arraigo popular de la fiesta proviene de ciertas celebraciones de los romanos. La historia, con mucho de leyenda, narra como en el emperador Constantino I el Grande, en el sexto año de su reinado, se enfrenta contra los bárbaros a orillas del Danubio, en una batalla cuya victoria se cree imposible a causa de la magnitud del ejército enemigo. Una noche Constantino tiene una visión en el cielo en la que se le apareció brillante la Cruz de Cristo y encima de ella unas palabras, "In hoc signo vincis" (Con esta señal vencerás). El emperador hizo construir una Cruz y la puso al frente de su ejército, que entonces venció sin dificultad a la multitud enemiga. De vuelta a la ciudad, averiguado el significado de la Cruz, Constantino se hizo bautizar en la religión cristiana y mandó edificar iglesias. Enseguida envió a su madre, Santa Elena, a Jerusalén en busca de la verdadera Cruz de Cristo. Una vez en la ciudad sagrada, Elena mandó llamar a los más sabios sacerdotes y logró hallar el lugar donde se encontraba la Cruz, pero no estaba sola. En el monte Calvario, donde la tradición situaba la muerte de Cristo, encontró tres maderos ensangrentados ocultos y para descubrir cuál era la verdadera cruz donde falleció Cristo, colocó una a una las cruces sobre personas enfermas, e incluso muertos, que se curaban o resucitaban al tocar la cruz que había sido la de Cristo. A partir de ahí nace la veneración a la Santa Cruz, ya que Santa Elena murió rogando a todos los que creen en Cristo que celebraran la conmemoración del día en que fue encontrada la Cruz.
POSIBLES ANTECEDENTES EN FESTIVIDADES PRIMAVERALES PAGANAS
Celebración de los mayos en el Reino Unido. Danzantes bailando alrededor de una maypole –vara de mayo-, y tocando tambores y flautas.
*Fiesta A la diosa Maia o Maya (Imperio Romano).
* Fiesta a la diosa griega Maya (Bona Dea= Buena Diosa).
*Festividad de la diosa romana Flora.
*Fiesta de los mayos (en torno a un tronco de árbol adornado).
Fiesta del Pirulito en Galaroza, junto a la Cruz de las Pizarrillas
FORMA TÍPICA DEL
SAGRADO MADERA DE LA CRUZ. SIN IMAGEN DE CRISTO
(Barrio del Matadero,
Huelva)
EXCEPCIÓN: LA IMAGEN
DEL CRISTO DE LA ALMORAIMA UNIDA A LA CRUZ SE APARTA DE LA ICONOGRAFÍA HABITUAL
DEL 3 DE MAYO (Castellar de la Frontera, Cádiz)
SOBRE LA EXISTENCIA
DE LAS CRUCES PAGANAS EN LAS CRUCES DE MAYO SE PRONUNCIABA EL ILUSTRADO JOSÉ
BLANCO WHITE EN 1806
BLANCO WHITE, José,
Cartas de España. “Carta novena”, Sevilla, 1806
*”Como muchas de las
fiestas de la Iglesia vinieron a sustituir los ritos paganos que los sacerdotes
no podía abolir de otra manera todavía tenemos restos del sagrado árbol de
Mayo en las pequeñas cruces que los niños adornan con flores y ponen sobre
unas mesas en las que arden velas compradas con los donativos recibido de sus
amistades.
He oído contar que en
Cambridge los niños visten una figura llamada la señora de Mayo, que colocan
sobre una mesa y piden dinero a los transeúntes. La diferencia entre esta
costumbre y la análoga española se deriva probablemente del hecho de que en un
país ha prevalecido el árbol de Mayo, y en otro, la Maya. La figura de la
Virgen María ue la Reforma convirtió en una muñeca sin nombre, tomó el sitio de
la última, en tanto que la cruz fue empleada para desterrar al primero. Creo
que las grutas iluminadas hechas con conchas de ostras para las que piden por
las calles los niños de Londres son los restos de algún símbolo católico que en
su día sustituyó a otro idolo más clasico. En Londres me sorprendió la
semejanza del alegato que los niños de ambos países recitan para pedir dinero.
El it is but once a year- no es más que una vez al año- me hizo recordar
el español: La Cruz de Mayo que no come ni bebe en todo el año”.
EL BERROCAL, LOS
VÍTORES A UNAS BESTIAS ENGALANADAS OCUPAN EL PROTAGONISMO PROFANO DE LA FIESTA
DE LA CRUZ.
CRUZ CAÑERO DE
CÓRDOBA: EJEMPLO ACTUAL DE CELEBRACION EN PATIOS.
CRUZ DE MAYO EN UN
PATIO DE VECINOS EN LA CALLE RESOLANA Nº 21 (SEVILLA).
CRUZ DE MAYO EN LA
CALLE, ARCOS DE LA FRONTERA (CÁDIZ)
FIESTA DE LA CRUZ DE
MAYO EN EL CASINO UNIVERSAL DE ARAHAL, CIRCA 1920 (SEVILLA)
TESTIMONIO DE LA
DECADENCIA DE LAS CRUCES EN GRANADA A PRINCIPIOS S.XX
*En este contexto,
Afán de Ribera, elaboraba unos vesos que describía el declive de la festividad
de las cruces en 1902 en la ciudad de Granada:
”Ya los famosos altares
”Ya los famosos altares
de la Santa Cruz de
Mayo,
apenas si se colocan
ni en la ciudad ni en
los barrios.
La fiesta tan
celebrada
en desuso va
quedando;
Los recuerdos
populares
Los modernismos
borraron.
Llaman vejeces
ridículas
De la patria, a lo
más santo,
Nada crean, más
destruyen,
Sino viles,
insensatos…”
EVOLUCIÓN SINTÉTICA
DE LAS FIESTAS DE LA CRUZ DE MAYO
• La difusión del
culto a la cruz en Andalucía esta vinculada a la conquista de Al-Andalus y a la
repoblación cristiana de estas tierras.
•A este respecto,
inmediatamente después de la Reconquista se construyeron ermitas que se
dedicaron a la cruz, así como fiestas en su honor.
• No obstante, entre
fines del siglo XIX y la década de los años 30 del siglo XX, las cruces de mayo
decayeron, desaparenciendo en muchos lugares de Andalucía Occidental a partir
de los años 50 del siglo XX.
TOMBOLA DE HERMANDAD
EN LA CRUZ DE LA VICTORIA PARA RECAUDAR FONDOS (HUELVA)
CHIRINGUITO
ORGANIZADO POR UNA HERMANDAD DE ALCALÁ LA REAL (JAÉN)
"La Hermandad del Santísimo Cristo de la Salud celebra la Santa Cruz durante los días 1, 2 y 3 de mayo en el barrio de San Juan, para lo cual se realizará un engalanado del patio de la Iglesia.
Además en los bajos de la casa hermandad se instalará un pequeño chiringuito, donde podrá acudir todo aquel que lo desee ya sea hermano o no para pasar un buen rato de convivencia."
ROMERÍAS
Además en los bajos de la casa hermandad se instalará un pequeño chiringuito, donde podrá acudir todo aquel que lo desee ya sea hermano o no para pasar un buen rato de convivencia."
ROMERÍAS
LAS CRUCES DE MAYO Y LA NATURALEZA
RELIGIOSIDAD EN LAS
FESTIVIDAD DE LAS CRUCES
EL PASO DE LA CRUZ EN
BURGUILLOS (SEVILLA)
SE DETIENE PARA
REZAR EL QUINTO MISTERIO DEL ROSARIO
SANTO ROSARIO EN
ALCALA DE LOS GAZULES
SE PUBLICITA LA
BENDICIÓN SACERDOTAL
UNA CRUZ DE MAYO
GADITANA
PROCESIÓN DE LAS
CRUCES DE MAYO EN BONARES
PROCESIÓN DE LA CRUZ
DE JÓVENES DEL BARRIO DE LOS PUNTALES (CÁDIZ)
CONVOCATORIA PARA
COSTALEROS EN BURGUILLOS (SEVILLA)
PROCESIÓN DE LA CRUZ
DE LA CALLE CABO (LA PALMA DEL CONDADO)
LAS CRUCES: UN
ESPACIO PARA LA SOCIABILIDAD
DESCRIPCIÓN DE LAS
CRUCES DE MAYO COMO EVENTOS DEDICADOS A LOS EMPAREJAMIENTOS
*Ciertamente, Benito
Más y Prat describía, en 1881, las relaciones que se producían entre ambos
sexos en la celebración de las cruces andaluzas del siguiente modo:
“…la Cruz de Mayo,
invadida desde las primeras horas de la mañana por los mozos y mozas del pueblo…
Innumerables corros rodeaban la cruz, ya cuchicheando, ya acompañando con
¡oles! y palmadas los alegres aires del jaleo o del polo gitano, o los
voluptuosos pasos movimientos del zapateado o de las sevillanas.
Corría manzanilla,
subían las voces, trinaban las guitarras, holgábase el sol… y concertábanse al
pié de la cruz las “pelas de pava”, las “tomas de dichos” y las amonestaciones
de la misa próxima”.
EXIBICIÓN PÚBLICA DEL
RITUAL DEL EMPAREJAMIENTO DE DOS JÓVENES EN LAS CRUCES DE MAYO DE BERROCAL
Ahí vemos las colás
en las que se planta la Cruz junto a elementos paganos, que no están ahí casualmente,
sino que ese era y es su sitio; la colá es un marco conciliador de doctrinas
diferentes, ejemplo de sincretismo. La esencia de la vida fluye pujante en
estos templos caseros, antaño para el amor sagrado, y los protagonistas así lo
sienten, que el sentimiento siempre pudo más que la razón.
Las colás se adornan con lo mejor que se tiene:
cortinas, encajes, tapices, rasos, blondas, espejos, cornucopias, grabados,
galerías y paños de cortadillo, que “cuando la Cruz viene, cada una luce lo que
tiene” o “quien de la fiesta sepa gozar, desde la víspera ha de empezar”; y se
celebran dos veces: la Cruz Grande, o sábado después del 3, y Cruz Chica, o sábado
siguiente. Los altares se cubren con tisú de plata y joyas y la Cruz puede ser
labrada, policromada, tallada o de ramos.
Quien entra a sacar a una moza al llano para bailar tiene que pagar “la voluntad”, dinero que se destina al coste del decorado, que “día de fiesta, algo cuesta”. Se dice “una perrilla pa la lú”, pero el significado va más allá.
Quien entra a sacar a una moza al llano para bailar tiene que pagar “la voluntad”, dinero que se destina al coste del decorado, que “día de fiesta, algo cuesta”. Se dice “una perrilla pa la lú”, pero el significado va más allá.
El aspecto de las colás transporta a unos a un
salón renacentista; a otros, a los antiguos templos del amor sagrado. En ellas
todo pasa sin filtros, sacando a bailar mozos a viejas, viejos a mozas, pastor
a heredera, pobres a ricas, sin que sea ley bailar bien, sino bailar sin más. Las
mujeres mayores cantan sin forzar la voz; sueltan coplas como rezos, o mantras,
o seguidillas en murmullo al son de las panderetas. La fiesta está hecha para
lo que está y quien quiera ir que vaya, que lo que tenga que pasar no quedará sin
que pase.
El llano es el espacio para bailar entre los
cuatro escaños: al frente, las mujeres mayores cantan, observan, vigilan; los
dos laterales son para las jóvenes con sus mejores galas, dispuestas a salir
con el hombre que se lo pida, guste o no, y el otro, haciendo de frontera con
la calle. Las mujeres avisan si la gente se agolpa allí: “Que corra aire por el
pasillo de los hombres”; son las que defienden sus cantos antiguos de la Cruz
de Mayo frente a las jóvenes, que atacan más los de moda. En ese ángulo esperan
turno los hombres para bailar, ya elegida de lejos la moza; al final, ella recibe
el dinero y lo deposita en el altar. “Una, dos, tres seguidillas / al pie de la
Santa Cruz / y al final de la tercera / la perrilla pa la lú”.
Cuando alumbraban los quinqués, el haz de luz
que salía a la calle oscura indicaba que allí había un pequeño santuario
esperando:“Por esta calle me voy,
por la otra doy la vuelta,
la niña que a mí me quiera,
que tenga la puerta abierta."
LA MUJER Y LA
FESTIVIDAD DE LAS CRUCES DE MAYO
-ACTO DE PROCLAMACIÓN DE LA ROMERIA MAYOR DE ROCIANA DEL
CONDADO.
Durante la primera quincena de mayo, la Santa Cruz de Arriba
celebra una tradicional verbena y la proclamación de la Romera Mayor.
-ROMERA MAYOR Y ROMERA DE HONOR DE ROCIANA DEL CONDADO
-LA REINA MADRE Y SUS DAMAS EN LA CRUZ DE MAYO DEL BARRIO EL
PALO (MÁLAGA, 1974)
-PARTICIPACIÓN ACTIVA DE LAS MUJERES EN LAS CRUCES DE ALOSNO
(HUELVA)
CRUCES DE MAYO E IDENTIDAD LOCAL
LA ALCALDESA DE ARCOS DE LA FRONTERA (CÁDIZ) VISITA A LOS
ORGANIZADORES DE LAS CRUCES DE MAYO.
LA ASOCIACIÓN DE AMAS DE CASA VIRGEN DE LA PAZ ES LA
ORGANIZADORA DE LA CRUZ DE MAYO DEL PATIO DEL CONVENTO DE SAN FRANCISCO DE
CÁDIZ.
LA ALCALDESA DE FUENGIROLA ASISTE A UN ACTO PÚBLICO DE LA
CRUZ DE MAYO.
ALGUNOS EJEMPLOS HISTÓRICOS DE POLITIZACIÓN DE LAS CRUCES
DE MAYO.
LÍDERES DE LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA VINCULADOS
PROPAGANDÍSTICAMENTE CON LAS CRUCES DE MAYO:
EL EMPECINADO Y ESPOZ Y MINA
(Retratos de Francisco de Goya).
LÍDERES DEL LIBERALISMO PUBLICITADOS EN LAS CRUCES DE
GRANADA: RIEGO Y ESPARTERO A CABALLO.
CRUZ DE MAYO DE LA UNED (ALMERÍA)
LA ASOCIACIÓN DE AMAS DE CASA VIRGEN DE LA PAZ ES LA
ORGANIZADORA DE LA CRUZ DE MAYO DEL PATIO DEL CONVENTO DE SAN FRANCISCO DE
CÁDIZ.
CRUZ DE MAYO ORGANIZADA POR LA HERMANDAD DEL STMO. CRISTO
DE LA VERACRUZ (CÁDIZ).
CRUZ DE MAYO ORGANIZADA POR LA AMPA DEL INSTITUTO DE
EDUCACIÓN SECUNDARIA DULCEAGUA (AGUADULCE. ALMERÍA).
RIVALIDADES Y COMPETENCIA EN LAS FIESTAS DE LAS CRUCES
LOS CONCURSOS DE CRUCES POTENCIAN LA COMPETITIVIDAD ENTRE LOS ORGANIZADORES.
LOS CONCURSOS DE CRUCES POTENCIAN LA COMPETITIVIDAD ENTRE LOS ORGANIZADORES.
EXCESOS EN LAS CONDUCTAS Y SEGURIDAD CIUDADANA.
BOTELLÓN DE JÓVENES EN LA FIESTA DE LA CRUZ DE MAYO DE
GRANADA.
ACTUACIÓN DE LA POLICÍA LOCAL EN EL BOTELLÓN DE LAS
CRUCES DE GRANADA.
TEXTO DEL BANDO DEL ALCALDE JOSÉ TORRES HURTADO (GRANADA,
2008)
· “Se ha conocido la convocatoria por diversos medios,
SMS y correos electrónicos, de un llamado macrobotellón en nuestra ciudad, que
tendría lugar durante los próximos dias 1, 2 y 3 de mayo. Dicha convocatoria no
hace sino empañar e imposibilitar el normal desarrollo de la tradicional fiesta
del Dia de la Cruz, que ha sido recuperada en su “génesis” popular, como
expresión del buen hacer artístico de vecinos, comerciantes, asociaciones e
instituciones, que engalanan nuestras calles y plazas con sus Cruces…. Ante la
perturbación de la vida ciudadana que dicha concentración representaría, ante
la necesidad de proteger la esencia de la Fiesta de la Cruz, y por obligación
de preservar bienes superiores, este Ayuntamiento de mi presidencia no tiene
más alternativa que denegar cualquier tipo de autorización para celebrar
actividades de ocio, así como el consumo de bebidas en los espacios públicos de
Granada, incluido el botellódromo, durante los días 1, 2 y 3 de mayo de 2008”.
PROCESIÓN DE CRUCES CHICAS EN ROCIANA
NIÑOS Y NIÑAS CON TRAJES TÍPICOS ANDALUCES ACOMPAÑANDO LA PROCESIÓN DE LA CRUZ.
CRUCES INFANTILES DE LOS SALESIANOS (CÁDIZ)
IMPULSO EDUCATIVO A LA CRUZ DE MAYO PREPARADA POR PADRES,
PROFESORES Y ALUMNOS DEL COLEGIO PRESENTACIÓN DE MARÍA (PEÑARROYA-PUEBLONUEVO)
LOS MATERIALES UTILIZADOS Y ARTE EFÍMERO EN LAS CRUCES DE MAYO
CRUZ DE MAYO DE IGUALEJA (MÁLAGA)
Esta fiesta, que tiene su origen en 1.878, consistía en las canciones que los mozos del pueblo ofrecían a las mozas casaderas el día 30 de Abril a partir de las doce de la noche; por ello el dicho de "echar los mayos" a las chicas.
Es un hecho muy arraigado en la cultura popular andaluza y tiene una importante incidencia en la Axarquía, especialmente en Nerja, Frigiliana y Maro. El día 3 de Mayo se exponen en el pueblo los monumentos florales a la exaltación de la Cruz, adornos con mantones de manila y objetos que sirven para embellecer los altares. Junto a las cruces, la música y los bailes andaluces son un testimonio de la fe y folklore de esta tierra.
Cada altar ofrece a los visitantes gastronomía típica exclusiva de este día, cuyo protagonista es la "miel de caña" en las distintas especialidades: los nísperos, las batatas, tortillitas de bacalao y perejil, palomitas de maíz, y el plato rey de este día "la arropía", que es la miel de caña calentada a fuego lento y amasada posteriormente.
Es un hecho muy arraigado en la cultura popular andaluza y tiene una importante incidencia en la Axarquía, especialmente en Nerja, Frigiliana y Maro. El día 3 de Mayo se exponen en el pueblo los monumentos florales a la exaltación de la Cruz, adornos con mantones de manila y objetos que sirven para embellecer los altares. Junto a las cruces, la música y los bailes andaluces son un testimonio de la fe y folklore de esta tierra.
Cada altar ofrece a los visitantes gastronomía típica exclusiva de este día, cuyo protagonista es la "miel de caña" en las distintas especialidades: los nísperos, las batatas, tortillitas de bacalao y perejil, palomitas de maíz, y el plato rey de este día "la arropía", que es la miel de caña calentada a fuego lento y amasada posteriormente.
CRUCES CHICAS DE BONARES (HUELVA).
PROCESIÓN DE CRUCES INFANTILES EN AGUADULCE (SEVILLA)
BAILES EN LAS CRUCES DE MAYO
ESCENA TÍPICA DE BAILE PINTADA POR SOROLLA EN UN PATIO DE
SEVILLA-FIESTA DE CRUCES.
MÚSICA EN LAS CRUCES DE MAYO
BANDA DE MÚSICA EN LAS CRUCES DE ROCIANA 2011
BANDA DE MÚSICA DE LA LEGIÓN EN LA PALMA DEL CONDADDO
(ESPECTÁCULO MILITAR)
GRUPO DE TAMBORILES EN LAS CRUCES DE ROCIANA
CARTEL QUE REPRODUCE EL BAILE DE SEGUIDILLAS ALOSNERAS EN
LAS “COLAS”
REUNIÓN DE HOMBRES CANTANDO FANDANGOS EN LAS CRUCES DE MAYO
DE ALOSNO.
BAILE DE SEVILLANAS CORRALERAS SOBRE TABLADO EN LEBRIJA
(SEVILLA)
EXPORTACIÓN DEL MODELO DE CRUCES ANDALUZAS A OTROS
LUGARES.
CRUZ DE MAYO EN LA CASA DE ANDALUCÍA EN ZARAGOZA.
El montaje de la cruz.
CÁNTICOS FLAMENCOS EN LAS CRUCES DE MAYO DE LA CASA DE
ANDALUCÍA EN ZARAGOZA.
OTROS RITUALES EN EL 3 DE MAYO: CANDELAS DE LAS CRUCES EN
UBRIQUE (CÁDIZ)
CORRIDAS DE TOROS-CRUCES DE MAYO DE ROCIANA DEL CONDADO
GASTRONOMÍA EN LAS CRUCES DE MAYO
DEGUSTACIÓN DE TORTAS DE ACEITE EN LAS CRUCES DE LEBRIJA
CRUCES DE MAYO EN AMÉRICA:
EL SUSTRATO ANDALUZ EN EL NUEVO MUNDO (IMÁGEN DE UNA
CRUZ DE MAYO EN VENEZUELA).
CONFERENCIA.”Las fiestas de Moros y Cristianos en Andalucía”. Salvador Rodríguez Becerra. Catedrático de Antropología Social de la Universidad de Sevilla, donde ha enseñado Antropología de la Religión y de Andalucía. Dirige el Grupo de Investigación y Estudios sobre la Religión en Andalucía (GIESRA).
MESA REDONDA.”Gastronomía y fiestas”.
Manuel Ruiz Torres es escritor y crítico gastronómico. Autor de Cocina y gastronomía en el Cádiz de las Cortes.
Manuel Ruiz Torres es escritor y crítico gastronómico. Autor de Cocina y gastronomía en el Cádiz de las Cortes.
“La gracia de
una fiesta radica en prepararla, no en hacerla, porque durante la fiesta
sufres, pero prepararla te gusta”. Sigmund Freíd.
“Los humanos
hacemos fiestas para superar los límites de la vida cotidiana. Cuanto más
radical sea ese cambio, cuanto mayor contraste tenga la fiesta con lo que
hacemos en nuestra vida cotidiana, será mejor la fiesta.” Marín Torné.
Suscintantemente,
las fiestas nos han acercado siempre a nuestros dioses, como representación de
nuestros miedos y nuestros anhelos. Y nos han acercado en compañía, nunca
solos. No hay fiestas solitarias.
La misma palabra
“comer”, desde su origen latino “comedere”, incluía ese prefijo “com” para
recordarnos que no debemos comer solos. Covarrubias,
Calendario gastronómico
religioso-festivo de la provincia gaditana, resultado de la cristianización del
calendario de la Tierra y las labores agrícolas.
Fiesta de Todos
los Santos o Tosantos
TOSANTOS
• Cádiz : Los
“Huesos de Santo”, donde se pretende exorcizar a la muerte. “Huesos de San
Expédito”, Turrón de Cádiz o“Pan de Cádiz”, pestiños.
Representaciones
expuestas en los mercados, utilizando animales y vegetales del mercado
habitual, en roles humanos.
•Algeciras: el paloduz
o regaliz, la caña de azúcar y las acerolas o azofaifas.
Confites
tradicionales de frutos secos: las peladillas y las garrapiñadas.
• Bornos: Berza
de Tosantos, “Huesos de San Expédito”.
• San Fernando:
Berza de coles.
•La Janda: Potajes
de castaña, dulces de membrillo.
• Setenil: “los
buñuelos de Tosantos”, desde época romana.
En otras
poblaciones, estos buñuelos de Tosantos se rellenan de cidra o de crema de
boniatos.
-
Con el mismo sentido pagano, se celebran las fiestas de difuntos. Este último producto,
el boniato, protagonizaba una interesantísima celebración de
-
Celebración del final de las cosechas- comidas de final
de trabajo, llamadas comidas de empresa.
Ubrique: Boniato
asados, frutos secos y primer mosto de
la temporada.
Trebujena: guiso
de borrego o de pavo, “garbanzos como conejos, celebración del mosto nuevo.
Marco de Jerez: guiso
de palomas.
FIESTAS DEL
SOLSTICIO DE INVIERNO: LA NAVIDAD
El Pavo, desde
su introducción desde América, símbolo de opulencia.
La Janda: Potajes
de castaña pilongas
La Nochebuena
era día de ayuno hasta hace 75 años, cuando sólo e permitía una colación, más
grande en ración, de pan, verduras y legumbres.
En la provincia
el plato popular era el potaje de castañas, la fabricación y consumo de dulces:
pestiños, buñuelos, polvorones de manteca, alfajores.
El origen de los
dulces navideños está vinculado al culto al trigo.
Alcalá de los
Gazules, se guardaba todo el año un pan redondo
bendecido en la Misa del Gallo, para proteger la casa.
Estos panes redondos,
con propiedades mágicas, redondos, son el origen de nuestro actual roscón de
Reyes, con una haba escondida para proporcionar la suerte a quien la encuentre.
Los Dulces de
Medina: Alfajores, etc...
Tradiciones para
bodas:
El pan de Bodas. En forma de castillo
coronados por sus reyes: tarta de pisos con los novios arriba.
El Pan Pintado, “pan que se hace en las
bodas y otras funciones, adornándole con unas labores”.
CARNAVAL
Carnaval de
Cádiz la Erizada, de 1980; y la Ostionada, de 1987, productos considerados, como
afrodisíacos, dándole el sentido sexualmente promiscuo de esta fiesta.
Pestiños
Comidas de Peñas
o Hermandades, coincidiendo con el patrón o la Virgen, para todos los públicos.
Olvera: las Tortillas de Carnaval y los Bollos de Carnaval.
En la Sierra: Buñuelos
San Fernando: currusquillos.
CUARESMA Y
PASCUA
La Cuaresma es una
celebración-representación de nuestras limitaciones. Se impone la abstinencia
de determinados productos, la prohibición de promiscuar otros y, finalmente, el
ayuno.
Cocinas sin
grasas o cocinas de pescado.
El Bacalao
En toda la
provincia las torrijas
Dulces Roscos de
huevo o rosquetes (Vejer, Conil, Trebujena, Chiclana
Vejer: El Pan
duro.
En la provincia,
los “huevos de vigilia” o huevos rellenos.
“Las
rebanadas de parida”. De origen sefardí, era alimento para las mujeres que
dieran a luz, como la renovación de la vida que, se celebra el Domingo de
Resurrección.
La Berza de Resurrección de Chiclana.
Domingo de
Pascua se comen los hornazos, en
Torre Alháquime, o en Alcalá del Valle.
Jimena de la
Frontera el piñonate,
El huevo en el
centro de los hornazos, es una señal que
representa la Resurrección de Cristo, simboliza la fertilidad.
Setenil huevos
duros.
Trebujena: hornazos preñados de chorizo.
En la Romería a
la Ermita de Nuestra Señora de los Remedios en Olvera, la Torta del lunes de
Quasimodo.
Las romerías son
una peregrinación y expresión colectiva a un lugar sagrado. Con la celebración de la convivencia y la visita al
santo o virgen.
•Romería de San
Isidro, de Setenil, se lleva hogaza de pan y huevos duros, para recordar la
alimentación antigua de los agricultores del pueblo.
• Romería de la
Virgen de los Santos, el Rancho o guiso de papas con carne y el gazpacho
caliente.
José Monforte es empresario y crítico gastronómico. Autor de Guía gastronómica de la provincia de Cádiz.
Pepe
Monforte, desarrolló en su ponencia, todo lo que conlleva la “Fiesta” y todo lo
que va unido, en distintas etapas, como, diversión, festejo, religiosidad y
gastronomía, desembocando en una perfecta comunión en la comida y el mundo del
vino.
Fiesta y gastronomía
van muy unidas de la mano, Monforte hace
hincapié en un Nacionalismo gastronómico que le queremos hacer llegar a
todos aquellos que nos visitan, así cada pueblo cada comarca saca sus mejores
galas, no solo en la fiesta, sino también en los guisos tradicionales que
afloran en la Fiesta, aparece la cocina tradicional de cada localidad.
Ejemplos como
la Romería en Alcala de los Gazules, con su gran guiso de papas con carne,
Olvera con su fiesta del lunes de Cuasimodo, y sus bizcochos decorados por los
niños, fiesta bastante antigua, donde los más pequeños decoran los bizcochos
con muñecos al igual que ahora esta de moda los famosos CupcaKes, y que desde
antiguo ya de hacían en esta población.
La afamada
fiesta de la urta a la roteña, o los puestos de pulpo seco y asado, con
volaores de la Línea de la Concepción.
Infinidad de
pueblos de nuestra provincia con fiesta y ferias, unidas al vino y sobre todo
al tapeo, algo primordial en Andalucía y en nuestra propia provincia, como es
la tapa.
Diserto como otro
tipo de fiesta como es el carnaval, no tiene un plato muy definido, así, como
mariscos changos, ostiones, erizos, pescao frito, camarones, comida de tiesos
como muy bien define Monforte, sin grandes aspavientos, no habiendo tampoco un
dulce característico del carnaval, citando las tortas de carnaval en Cádiz y
los corrusquillos en La Isla, San Fernando.
Sin embargo
destaca platos de Semana Santa, como, guiso de alcauciles o alcachofas, guisos
de bacalao en tomate, con garbanzos, o lo típico de la navidad o plato estrella
como era el pavo, cosa que ha cambiado en la mayoría de los hogares, con nuevas
costumbres como son el marisco, y otro tipo de carnes.
Si destaca la
gran variedad de dulces de la Semana Santa, aunque dulces muy austeros, gañotes
de la sierra, torrijas, arroz con leche, roscos de semana santa y el peculiar
pan duro de Vejer, dulce dos veces horneado y que hay que acompañarlo de café o
algo para mojar, sino es tarea difícil de comer.
La Alpistera
de Sanlucar de Barrameda, Tosantos, huesos de santo, huesos de San Expedito,
sin cremas muy básicos, y sin florituras demuestran la austeridad de estos
dulces, que no tienen por que hacer ostentación, pero si, fortalecer y ayudar
después de los días de ayuno y cuaresma.
En síntesis,
una reflexión histórica, antropológica y periodística recogida por el
gastrónomo y escritor Pepe Monforte a través de toda nuestra provincia y que
gracias a él, muchas de estas tradiciones y están documentadas y recuperadas.
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