Visitas guiadas cada media hora.
Habrá aparcamiento vigilado y vigilancia durante todas las jornadas.
Historiadores como Hipólito Sancho sitúan la construcción de la ermita de Santa Clara en el siglo XVI, unos años en los que El Puerto disfrutó de una época de prosperidad que, lógicamente, también se manifestó en la construcción de edificios, religiosos en su mayoría. Estas construcciones se vieron acrecentadas por el apoyo que los duques de Medinaceli, señores jurisdiccionales de la ciudad, siempre ofrecieron a las órdenes y a los edificios de carácter religioso.
Pero la imagen actual de la ermita de Santa Clara no se corresponde con la que debió presentar en esos primeros años, pues la que ha llegado a nosotros es fruto de restauraciones posteriores, muy probablemente del siglo XVIII. El archivero de la ciudad en 1764, Ruiz de Cortázar, cita para esa época 16 ermitas, unas de las cuales era precisamente la de Santa Clara, que ya entonces estaba situada dentro de la población y servía como sede a la hermandad de Nuestra Señora de la Cabeza. La integración del edificio en la ciudad es consecuencia de la fiebre edificatoria que se produjo en los inicios del siglo XVIII y que llevó a extender El Puerto hacia esta zona.
Tras años de abandono, la ermita va a ser rehabilitada por una escuela-taller que ha empezado a funcionar el pasado mes de mayo. Y con el propósito de que tanto portuenses como visitantes tengan la ocasión de conocer este edifico antes de su rehabilitación y posterior puesta en uso, el Centro Municipal del Patrimonio Histórico de la Concejalía de Cultura abre sus puertas con visitas guiadas, dedicándole este año las Jornadas “De par en par”, una actividad que pretende poner en contacto al ciudadano con el patrimonio cultural menos conocido.
Mercedes García Pazos
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